Daniel Ortega, Rosario Murillo y Juan Carlos Ortega Murillo dicen ser periodistas. Sin embargo, no hay una sola pieza memorable un premio, un reconocimiento, un libro, un reportaje investigativo, una crónica, una columna, nada… Lo único que se les reconoce, y así lo ha escrito la historia, es el odio enfermizo contra el periodismo libre, al que se han encargado de perseguir, atacar, asfixiar y confiscar.
