La madrugada de este viernes la Policía del régimen de Daniel Ortega allanó la Curia Episcopal de la Diócesis de Matagalpa, donde se encontraban desde hace 16 días en “casa por cárcel” el obispo Rolando Álvarez, cinco sacerdotes y tres laicos. Casi siete horas después del asalto, la Policía informó que monseñor quedó bajo arresto domiciliario en Managua y las otras ocho personas fueron trasladadas al Chipote.
El asalto a la Curia Episcopal habría ocurrido alrededor de las 3:00 de la mañana, reportaron los medios de la Diócesis de Matagalpa. Horas después del asalto a la Curia, la Policía orteguista allanó la casa de los padres de monseñor Álvarez, denunció la sobrina del religioso.
Además de monseñor Álvarez, en la Curia permanecían retenidos los sacerdotes José Luis Díaz y Sadiel Eugarrios, primero y segundo vicario de la Catedral San Pedro, respectivamente; Óscar Escoto, párroco de la iglesia Santa María de Guadalupe; Ramiro Tijerino, rector de la Universidad Juan Pablo II y encargado de la parroquia San Juan Bautista, quien padece de diabetes, y el padre Raúl González.
También estaban los seminaristas Darvin Leyva y Melkin Sequeira, y el camarógrafo Sergio Cárdenas.
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Cuando inició la retención policial, acompañaban a monseñor Álvarez el pianista Henry Corvera y el camarógrafo Flavio Castro, quienes fueron sacados este martes de la Curia Episcopal. LA PRENSA conoció extraoficialmente que Corvera habría sido deportado con su familia hacia El Salvador.
Fuentes cercanas a la Iglesia confirmaron además que la Conferencia Episcopal de Nicaragua (CEN) prepara un comunicado.
Condenan el secuestro
El obispo auxiliar de la Arquidiócesis de Managua, monseñor Silvio Báez, reaccionó “indignado y dolido” y condenó “el secuestro nocturno de Mons. Álvarez. ¡Quienes lo sepan, digan dónde está mi hermano obispo! ¡Que sus secuestradores respeten su dignidad y lo liberen! De nuevo, la dictadura vuelve a superar su propia maldad y su espíritu diabólico”.
En tanto, el padre Edwin Román, desde el exilio, escribió en sus redes sociales: “Que indignante, se han llevado a Monseñor Rolando Álvarez, con los sacerdotes que estaban con él. Basta ya de tanto silencio!, hablen quienes tienen que hablar y dar la cara, a eso se le llama ‘pecado de omisión’”.
El Canal Católico de Nicaragua, que dirige monseñor Álvarez, publicó que se mantienen en oración permanente por el obispo.
“Preocupémonos por llevar el traje de fiesta en el Reino de Dios”
El mensaje más reciente de monseñor Álvarez en Twitter, publicado en los primeros minutos de este viernes, hace alusión a la parábola de Jesús sobre el reino de los cielos en el capítulo 22 del Evangelio de San Mateo: “Preocupémonos por llevar el traje de fiesta en el Reino de Dios”. Mons. Rolando José.
Monseñor Álvarez, actualmente, es el único miembro de la Conferencia Episcopal de Nicaragua (CEN) que tiene dos cargos asignados por el Vaticano: obispo de la Diócesis de Matagalpa y administrador apostólico de la sede vacante en la Diócesis de Estelí.
Además, está a cargo de las áreas de Comunicación y Atención a Laicos desde la CEN para el período 2022-2024 en la Asamblea anual realizada en noviembre. También es presidente del Departamento de Juventud de la CEN.
Álvarez fue nombrado por Benedicto XVI obispo de la Diócesis de Matagalpa el 8 de marzo de 2011 y tomó posesión el 2 de abril de ese año. Es el noveno en el cargo, desde que fue erigida la Diócesis en diciembre de 1924.
El obispo, de 55 años, fue nombrado por el papa Francisco, en julio de 2021, administrador apostólico de la “sede vacante” de la Diócesis de Estelí, tras la aceptación de la renuncia por edad de monseñor Juan Abelardo Mata, en el cargo de obispo.
La Diócesis de Estelí fue erigida en diciembre de 1962, está próxima a cumplir 60 años y ha tenido tres obispos.
Feligreses de Ciudad Darío salen a respaldar parroquia
En el municipio de Ciudad Darío los feligreses salieron para acompañar a los sacerdotes de la iglesia Santa Lucía, que está bajo asedio policial desde el martes.
Tras el repique de campanas en la iglesia de Ciudad Darío, los feligreses se congregaron en las afueras de la parroquia de Santa Lucía, asediada desde hace cuatro días por la Policía, reportó la iglesia desde sus redes sociales.
Monseñor Rolando Álvarez se encontraba bajo asedio policial desde el 3 de agosto, la mañana del día siguiente la Policía le impidió realizar una procesión con el Santísimo Sacramento y desde entonces quedó retenido en la Curia Episcopal de Matagalpa.
El viernes 5 de agosto fue acusado por la Policía, a través de un comunicado, de intentar “organizar grupos violentos” y anunció el inicio de un proceso de investigación que conlleva a mantener en sus domicilios a los señalados, cuyas identidades no fueron reveladas.
El aviso de la Policía del régimen se da horas después que la vicepresidenta designada y vocera, Rosario Murillo, amenazó afirmando “que no se deben infringir las leyes, mucho menos cometer delitos” y dos diputados sandinistas acusaron al obispo Álvarez de estar “incitando a la violencia”.
Condena internacional
El secretario general de la Organización de Estados Americanos (OEA), Luis Almagro, condenó el secuestro de monseñor Álvarez, los sacerdotes y los laicos. Hace una semana el Consejo Permanente del organismo aprobó una resolución, apoyada por 27 países, en la que condenan la escalada represiva del régimen de Ortega.
Por su parte, el Consejo Episcopal Latinoamericano (Celam), que reúne a los obispos de Latinoamérica y el Caribe, hizo un llamado de alerta a la comunidad internacional.
La Conferencia Episcopal de Costa Rica (Cecor) fue la primera organización de obispos en la región en hacer público su pronunciamiento.
El Arzobispo Metropolitano de Panamá, Jpsé Domingo Ulloa se unió “a las voces que claman por la libertad inmediata” de monseñor Álvarez a quien refiere como “mi hermano en el episcopado” a la vez que considera que “los hechos aberrantes que rodean esta detención son motivo de alarma y dolor en toda la iglesia Latinoamericana”.