14
días
han pasado desde el robo de nuestras instalaciones. No nos rendimos, seguimos comprometidos con informarte.
SUSCRIBITE PARA QUE PODAMOS SEGUIR INFORMANDO.

Misioneras de la Caridad, al momento de llegar a Costa Rica a inicios de julio 2022. Cortesía.

Misioneras de la Caridad, una historia de servicio en Nicaragua a la que Daniel Ortega puso fin

Tras el cierre de sus proyectos humanitarios, la cancelación de su personería jurídica y la confiscación de sus bienes, las religiosas fueron expulsadas por el régimen Ortega Murillo

Iniciaba la década de los 80 y Nicaragua enfrentaba una situación sociopolítica compleja. Tras la caída de la dictadura de Anastasio Somoza, al poco tiempo Daniel Ortega, en representación del Frente Sandinista asumió el poder. Pero su manera de gobernar provocó un nuevo conflicto armado que sumió al país en una nueva crisis. La situación de hambre y miseria se agudizó tanto que cooperantes de todo el mundo llegaron para ayudar a los más necesitados. Entre ellos, vino un grupo de monjas con saris blancos cruzados por tres franjas azules, eran Misioneras de la Caridad, orden fundada por Madre Teresa de Calcuta.

Misioneras de la Caridad
En 1986 la madre Teresa de Calcuta visitó Nicaragua y se reunió con el presidente Daniel Ortega. Foto tomada del portal oficial El 19 Digital

En ese momento, la situación no era la más óptima para las religiosas, porque el gobierno sandinista estaba enfrentado con la Iglesia católica. Sin embargo, pudieron establecerse en el país y a partir de 1986, tras una visita de Madre Teresa al país y durante la cual Ortega accedió reunirse con ella, les proporcionó las condiciones necesarias para que desarrollaran su misión benéfica.

En esa única estadía en el país, Madre Teresa también visitó el Santuario Diocesano Virgen María de Cuapa, en Chontales. “En 1986 tuvimos la dicha de tener a la hoy Santa Madre Teresa de Calcuta en su primer y único viaje en Nicaragua. También visitó el Santuario de nuestra Madre en Cuapa donde la Santísima Virgen María apareció en 1980 a un humilde Sacristán años después ordenado sacerdote, el presbítero Bernardo Martínez de feliz memoria”, reseña una publicación de Facebook del santuario.

En el lugar, Madre Teresa se quitó sus sandalias y caminó descalza. Oró desde ahí por la paz de Nicaragua.

Así inició la misión benéfica que concluyó este 6 de julio de 2022, con la expulsión de la hermanas de esa orden, tras el cierre forzado de sus proyectos y la confiscación de todos sus bienes.

Atendieron a los ancianos necesitados

Desde su llegada a Nicaragua, con apoyo de voluntarios y donaciones, las religiosas dirigieron su ayuda a los más vulnerables, entre ellos ancianos abandonados o de escasos recursos. En Granada y Managua fundaron hogares para personas de la tercera edad, donde además de brindar alimentación y cuidados diarios a los que permanecían internos, a otros les entregaban también alimentos, ropa, medicinas y artículos de primera necesidad.

Lea también: Misioneras de la Caridad, expulsadas por el régimen orteguista, llegan a Costa Rica

Hogar de Ancianos Misioneras de la Caridad. Foto tomada de las redes sociales de Israel González

Antes del mediodía era común ver a decenas de ancianos en fila frente al Hogar Sagrado Corazón de Jesús, ubicado en la Carretera Norte, en Managua, esperando por su almuerzo. Originalmente este hogar funcionó en el barrio El Calvario, de la capital. Lo mismo ocurría en el centro de las Misioneras de la Caridad, ubicado en La Sabaneta, Granada.

Cuidaron a la niñez y adolescencia

Las religiosas también fungieron como madres, ella fundaron guarderías infantiles donde atendían a bebés de mamás solteras y familias de escasos recursos que no tenían quién cuidara a sus hijos mientras trabajan. En Granada tenían también un Hogar de Adolescentes abandonadas o abusadas, a quienes les garantizaban educación integral. En estos y otros lugares cercanos a los mercados las monjas también impartían reforzamiento escolar a estudiantes en riesgo, la mayoría hijos de comerciantes de los mercados o de vendedores ambulantes.

También puede leer: Misioneras de la Caridad emprenden su viaje de salida de Nicaragua escoltadas por agentes del régimen Ortega Murillo

Guardería manejada por las Misioneras de la Caridad. Foto tomada del portal oficial El 19 Digital

¿Casi cuatro décadas después detectaron irregularidades?

El apoyo financiero que brindaron decenas de familias nicaragüenses y el trabajo voluntario de otros miles permitió que por cerca de cuarenta años las misioneras construyeran diversas obras para garantizar la atención que brindaban a los más vulnerables y necesitados, desde bebés hasta ancianos.

Puede leer también: “Lloraron bastante esas monjas”. Tras orden del régimen para cerrar sus proyectos, Misioneras de la Caridad se preparan para salir del país

Pero, tras cuatro décadas, fue hasta hace semanas que el Ministerio de Gobernación “se dio cuenta” que no estaban autorizadas para brindar ninguno de los servicios que desarrollaban. Inicialmente cerraron sus proyectos aduciendo la falta de autorización; luego autoridades gubernamentales tomaron sus instalaciones. Durante todo este proceso, agentes de la Policía acosaron a las religiosas y a los beneficiarios de sus proyectos que se acercaban a sus instalaciones en busca de la ayuda que por años recibieron.

Por turnos, patrullas se apostan o rondan la zona del centro Misioneras de la Caridad en Granada, denuncian vecinos. LA PRENSA constató este jueves la presencia policial. Foto LA PRENSA.

Asamblea Nacional dio la estocada final a las Misioneras de la Caridad

El pasado 4 de julio, la Asamblea Nacional dominada por el sandinismo canceló la personería jurídica de más de cien organizaciones no gubernamentales (ONG), entre ellas la asociación que las religiosas fundaron en el país.

Sobre la Asociación Misioneras de la Caridad señalan que las religiosas no estaban acreditadas por el Ministerio de la Familia para funcionar como “guardería, centro de desarrollo infantil, hogar de niñas ni asilo de ancianos” y sus “estados financieros reportados al Ministerio de Gobernación no coinciden con los documentos presentados en la supervisión”, entre otros motivos.

Con ello, el Legislativo “legalizó” el cierre de operaciones de los proyectos de las misioneras. En los últimos días, ellas repartieron los alimentos y las pocas pertenencias que los funcionarios estatales dejaron en sus instalaciones.

Lea también: Cierran obras de beneficencia que administraban religiosas de la Orden Madre Teresa de Calcuta

Agentes de la Dirección General de Migración y Extranjería escoltaron a las Misioneras de la Caridad hasta la frontera de Peñas Blancas. LA PRENSA

La DGME consumó la expulsión

La mañana del miércoles 6 de julio, la Dirección General de Migración y Extranjería (DGME) fue la encargada de poner fin a casi cuarenta años de labor benéfica. Agentes de esa entidad expulsaron a las religiosas del país y las escoltaron hasta la frontera de Peñas Blancas, para que se trasladaran a Costa Rica.

Costa Rica las recibe con los brazos abiertos

Luego de realizar los trámites correspondientes, las religiosas ingresaron a Costa Rica donde las esperaban y recibieron con los brazos abiertos, tal y como ha ocurrido con más de cien mil nicaragüenses que en los últimos años, huyendo de la represión de Ortega, han ingresado a ese país vecino buscando refugio.

Puede interesarle: Mientras monjas empacan y reparten lo que pueden entre sus beneficiarios, Policía acecha la zona del centro Misioneras de la Caridad

Monseñor Manuel Eugenio Salazar Mora, obispo de la Diócesis de Tilarán-Liberia, en Costa Rica, confirmó la llegada de las misioneras a través de sus redes sociales. “Hermanas sean bienvenidas a estas tierras, nuestra Diócesis está de puertas abiertas para recibirlas, gracias por su ejemplo, entrega y servicio a los más pobres entre los pobres”.

misioneras de la caridad,
Misioneras de la Caridad expulsadas de Nicaragua llegan a la Diócesis de Tilarán en Costa Rica. Foto tomada de las redes sociales.

A pesar de la angustia que expresaron en los últimos días por la situación que enfrentaron, durante el viaje se les vio serenas, seguramente confiadas en que su fundadora, Santa Teresa de Calcuta las protegerá donde vayan y confiando en que cuidará de los niños, adolescentes y ancianos que a su partida dejan en el desamparo del que por años lucharon rescatarlos: el hambre, la falta de educación, de albergue y de amor.

misioneras de la caridad,
Tomada de Facebook

Puede interesarte

×

El contenido de LA PRENSA es el resultado de mucho esfuerzo. Te invitamos a compartirlo y así contribuís a mantener vivo el periodismo independiente en Nicaragua.

Comparte nuestro enlace:

Si aún no sos suscriptor, te invitamos a suscribirte aquí