El discurso antinmigrantes indocumentados en Estados Unidos ha escalado en los últimos días en el contexto electoral estadounidense, alcanzando los programas que permiten a miles de migrantes —incluidos nicaragüenses— vivir y trabajar de forma legal.
Lo más reciente fue lo que dijo el candidato a vicepresidente republicano, James Davis Vance, quien aseguró durante un mitin que para él los migrantes siguen siendo “ilegales”, pese a que muchos se encuentran legalmente en suelo norteamericano gracias a la figura del parole humanitario o con el Estatus de Protección Temporal (TPS).
Lea también: A 25 años del primer TPS, una redesignación podría ayudar a miles de nicaragüenses en EE. UU.
“Si Kamala Harris agita la varita ilegalmente y dice que estas personas ahora están aquí legalmente, aún así los llamaré extranjeros ilegales”, dijo en respuesta a la pregunta de una periodista después de un mitin en Raleigh, Carolina del Norte.
El TPS es un estatus legal
El senador estadounidense y fórmula de Trump afirmó falsamente que los programas son ilegales. “Una acción ilegal de Kamala Harris no hace que un extranjero sea legal”, apuntó.
Sin embargo, en el caso del TPS para Nicaragua, este fue designado a raíz de la devastación ocasionada por el huracán Mitch, y está dirigido a nicaragüenses que vivieron en EE. UU. antes del 30 de diciembre de 1998 y que no salieron de ese país desde el 5 de enero de 1999.
Actualmente 4,100 nicaragüenses se encuentran con ese estatus, por lo que organizaciones en suelo norteamericano han sostenido una campaña de redesignación del TPS para los nuevos migrantes que han llegado en los últimos años y que necesitan esta protección.
Lea también: La historia de una familia nicaragüense: de solicitante de refugio en Costa Rica a reasentada en EE. UU.
El expresidente Trump y quien compite nuevamente para la Presidencia también ha usado durante su campaña una retórica contra los migrantes que han llegado a suelo norteamericano de manera legal, al punto de prometer que una vez que llegue a la Presidencia eliminará inmediatamente los programas de asistencia migratoria que bajo la Administración de Joe Biden se han puesto en marcha.
“Cancelaremos la aplicación de teléfono de Kamala (Harris) para el contrabando de inmigrantes ilegales, CBP-One, revocaremos la inmunidad ante la deportación, suspenderemos el reasentamiento de refugiados y devolveremos a los inmigrantes ilegales de Kamala a sus países de origen”, sentenció Trump.
Reasentamiento de refugiados en riesgo
El programa de Reasentamiento de Refugiados es un método implementado por la administración del presidente Biden para las personas con necesidades de protección humanitaria que han abandonado su país debido a la persecución por un motivo protegido, no pueden regresar a casa de manera segura y requieren el reasentamiento permanente en un tercer país porque no pueden permanecer en el país donde residen actualmente.
Nombrado Programa de Admisión de Refugiados de Estados Unidos (USRAP, por sus siglas en inglés), esta es una iniciativa conjunta de la Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (Acnur) y la Organización Internacional para la Migración (OIM), que cuenta con el apoyo de 30 países diferentes, entre ellos Estados Unidos.
Para los nicaragüenses, este reasentamiento ha sido una de las soluciones a la inseguridad que viven los perseguidos políticos en Costa Rica. Y es una de las vías ofrecidas por las autoridades estadounidenses y guatemaltecas para los 135 recién excarcelados políticos y desnacionalizados por el régimen.
CBP One inició bajo el mandato de Trump
Otra de las vías para que los migrantes ingresen legalmente a Estados Unidos es la aplicación móvil CBP One, que sirve para solicitar asilo en Estados Unidos a través de los puestos fronterizos terrestres.
Pese a que Trump atacó CBP One y la llamó “la aplicación de teléfono de Kamala”, esta inició bajo la administración del expresidente republicano, en octubre del 2020.
La aplicación móvil es para todos los extranjeros que no cuenten con los documentos necesarios para ingresar legalmente a Estados Unidos, ahí solicitan una cita para presentarse a alguno de los puertos de entrada terrestre y tener una entrevista. A diferencia del parole humanitario, no se necesita tener un patrocinador en Estados Unidos.
CBP One ha sido utilizada para que los migrantes que viajan por tierra desde Sur o Centroamérica atraviesen México de forma segura, ya que tener la cita confirmada es garantía para que las autoridades mexicanas les permitan el paso por el país.
De acuerdo con los datos actualizados por la oficina de CBP, desde enero de 2023 hasta fines de agosto de 2024, aproximadamente 813 mil personas “programaron citas con éxito para presentarse en los puertos de entrada en lugar de arriesgar sus vidas en manos de contrabandistas”. Las principales nacionalidades procesadas han sido: venezolana, cubana y mexicana.
Deportaciones y parole
La otra amenaza de Trump es suspender las inmunidades a las deportaciones. Sobre esto, la abogada de inmigración, Astrid Montealegre, dijo que causa incertidumbre y deja a los migrantes en el limbo, ya que estas legislaciones se pueden pelear en las salas judiciales.
El activista y experto en leyes migratorias, Rommell López, señaló que la revocación de la inmunidad a la deportación significa “el fin de la protección contra la deportación y esto implicaría que ciertos grupos que antes estaban protegidos, como aquellos con permisos temporales o en espera de trámites migratorios, podrían perder su estatus y ser deportados” de forma inmediata.
Lea también: ¿Cómo se solicita el parole humanitario por medio de la aplicación CBP One?
Mientras, el parole humanitario, que estaba vigente para venezolanos y que se extendió en enero del 2023 para cubanos, haitianos y nicaragüenses, permite que los nacionales de esos países viajen de manera legal a suelo norteamericano donde podrán vivir y trabajar durante un período de dos años.
Lea detalles: Quedan menos de cuatro meses para que se cumplan los dos años de parole humanitario
Hasta finales de agosto, un total de 542 mil cubanos, haitianos, nicaragüenses y venezolanos fueron examinados y les aprobaron el parole humanitario, de ellos 530 mil viajaron legalmente a través de vuelos comerciales a Estados Unidos.
Del total de los aprobados, 214 mil son haitianos, 121 mil venezolanos, 111 mil cubanos y 96 mil nicaragüenses, según cifras actualizadas por la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza de los Estados Unidos (CBP, por sus siglas en inglés).
Causa preocupación a comunidades migrantes
El mensaje que envía la fórmula republicana, a lectura de expertos en migración, preocupa “a las comunidades migrantes”.
Harold Rocha, abogado y académico de Derecho Internacional y presidente del Nicaraguan American Legal Defense and Education Fund (Naldef), mencionó que “este mensaje del expresidente Trump, si bien no sorprende, porque migración ha sido tema prioritario en su estrategia política desde la campaña de 2016, preocupa a las comunidades de migrantes por sus posibles consecuencias en caso de que resultara electo en noviembre”.
A su vez, Rocha recalcó que el exmandatario “en el pasado impulsó la construcción de un muro en la frontera entre Estados Unidos y México con fines parecidos. Este mensaje emplea retórica más violenta y habla de ‘invasión’, un vocablo de connotaciones bélicas. En conjunto dibuja una visión tan extrema como inviable, pero que puede influir en el apoyo electoral de sus bases”.
Por su parte, López valoró que en un eventual escenario, si las políticas mencionadas se implementan, “las personas indocumentadas enfrentarían un aumento significativo en las deportaciones y restricciones en su capacidad para permanecer en Estados Unidos”, asimismo se limitaría el ingreso por vías legales a aquellos con intenciones de entrar al país norteamericano.