Lo siento, Compañía de Jesús, por la violencia a la que han sido sometidos en un país que ustedes han enriquecido bajo la mirada de Ignacio. Gracias por su labor, que no caerá en terreno infértil. Y gracias por los años en que me abrieron los archivos y las aulas de la UCA.
Andrés Pérez Baltodano
El olvido: una receta envenenada
Los nicaragüenses nos hemos declarado amnésicos frente a la compleja década de los 1980. Nadie ha asumido responsabilidad alguna por las decenas de miles de vidas que se perdieron en la guerra de esos años, ni la “Contra” ha pedido perdón por sus atrocidades, ni el FSLN ha reconocido las suyas.
Lecciones de la Revolución Sandinista
No debemos pensar que sacar a Ortega es lo único que importa hoy y que mañana, “en el camino, se manejarán las cargas”. En el camino las cargas nos pueden aplastar, como aplastaron a la Revolución Sandinista.
El lenguaje del contractualismo y la oposición
La “magia” de un discurso político auténtico facilita la construcción de un consenso social porque teje redes de sociabilidad que permiten establecer visiones compartidas. Por el contrario, un discurso político inauténtico hace imposible la construcción de este consenso…
Para salir de la crisis: ¿Convicciones o consecuencias?
Dialogar con el gobierno tiene un costo porque contribuye a legitimarlo. Pero no dialogar también tiene un precio que se cotiza en el dolor y la sangre de nuestros migrantes, exiliados y los que seguirán sufriendo el estancamiento económico de nuestro país.
Ruta ética para salir de la crisis
La ética de la responsabilidad es la única que puede ayudar a la oposición a construir puentes entre los grupos que la integran. Pero los puentes no se sostienen en el aire… la oposición nicaragüense debe hacer para empujar a nuestro país hacia un futuro mejor.
¿Dejar a un lado las ideologías?
Si aceptamos que las ideologías han servido para razonar y refrenar las pasiones humanas, debemos también aceptar que el atraso político de Nicaragua en general, y el de la oposición anti-OrMu en particular, no pueden atribuirse a un exceso de ideología sino, por el contrario, a nuestra desnutrición ideológica.
Los “liderazgos emergentes”: ¿Activistas o futuros estadistas?
Actuar políticamente de acuerdo con una comprensión de nuestra realidad y una visión de futuro, para no terminar, como han terminado algunos talentosos y talentosas jóvenes nicaragüenses, pensando políticamente en concordancia con las oportunidades que ofrece la llamada “Cooperación”.
De sinsentidos y falacias
Nicaragua no va a cambiar hasta que no desarrollemos un discurso que ilumine nuestra práctica política, en vez de oscurecerla.
Lo que natura no da, el Chipote no lo presta
Por cada Nelson Rolihlahla Mandela hay mil ejemplos de presos políticos a quienes la cárcel no logró hacerlos crecer. Daniel Ortega es uno de ellos.