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Tras ocho años en los que registró una drástica reducción en sus utilidades, que bajaron de 216 millones a menos de diez millones de córdobas anuales, la Corporación Agrícola SA (Agricorp) vendió una de sus cuatro subsidiarias, incrementó el capital social y su propietaria, Grain Hill Corporation SA le inyectó siete millones de dólares para saldar deudas fiscales, a través de la recompra de un paquete de acciones.
En 2023, estos movimientos le dieron un respiro a sus finanzas y esto permitió que en noviembre la perspectiva de su calificación de riesgo pasara de negativa a observación.
No obstante, la Sociedad Calificadora de Riesgo Centroamericana (SCR) aclaró que “el Consejo de calificación continuará dando seguimiento a la expectativa de la evolución de la compañía, fundamentado en que esta posee un alto endeudamiento, estrechos indicadores de liquidez y de coberturas ajustadas del EBITDA, aspectos que han sido señalados en revisiones anteriores”.
El EBITDA (Earnings Before Interest Taxes Depreciation and Amortization) es un indicador financiero que muestra el beneficio las empresas antes de restar los intereses que tienen que pagar por las deudas, los impuestos y las depreciaciones por deterioro.
Desde 2016 utilidades de Agricorp mermaron
LA PRENSA intentó obtener la versión de la empresa sobre los esfuerzos que realizan para recuperar los niveles de rentabilidad de antes de 2016, pero al cierre de esta nota no habían contestado nuestras consultas.
La Corporación Agrícola SA (Agricorp) tenía cuatro subsidiarias: Agricorp dedicada a la industrialización y distribución de alimentos básicos; Industria San Francisco, que produce y comercializa huevos; Nicasal, que produce y comercializa sal; e IP Management, de la que no hay información.
Por ser una empresa que transa en Bolsa, Agricorp está obligada a publicar la información sobre sus finanzas. Según los estados financieros publicados en el portal web de la Bolsa de Valores de Nicaragua (BVN), hasta antes de 2016 las utilidades de la empresa junto a sus subsidiarias superaban los 200 millones de córdobas anuales. Esto se lograba a pesar de las pérdidas que les generara Industria San Francisco.
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¿Qué motivó el descenso de las utilidades?
En 2015 la empresa obtuvo 216.55 millones de córdobas en ganancia, al año siguiente estas bajaron a 167.97 millones y en 2017 a 18.02 millones. Pese al estallido de la crisis sociopolítica, en 2018 subieron hasta 57.73 millones, pero al año siguiente bajaron a 8.63 millones y en el año de la pandemia se desplomaron y la empresa registró 34.92 millones en pérdidas. En 2021 obtuvieron 28.43 millones en ganancias, al año siguiente 9.88 millones y el año pasado 59.38 millones, monto que convierte al 2023 en el más rentable de los últimos ocho años.
Entre otros motivos, la empresa atribuye el descenso de su rentabilidad a incrementos en sus costos de producción, provocados por alzas en los impuestos y porque “el precio del arroz importado de Estados Unidos (arroz en granza) mostró un comportamiento alcista y con mucha volatilidad, lo que se explica por la oferta y demanda mundial, aunado al aumento en el costo de los commodities y la incertidumbre por la guerra en Europa del Este”.
También contribuyó al descenso de la rentabilidad de Agricorp el mal desempeño de su subsidiaria Industria San Francisco. La avícola reportó pérdidas de 26.05 y 20.92 millones de córdobas en 2016 y 2017, respectivamente. El 2018 fue su mejor año porque obtuvo 97.57 millones de córdobas en ganancias. Pero en 2019 volvió a generar pérdidas, en esta ocasión de 1.68 millones de córdobas y entre 2020 y 2022 obtuvo entre 14.11 y 4.49 millones de córdobas en utilidades. Esto llevó a los accionistas a ponerla en venta en 2022.
Vendieron Industria San Francisco
“Comunicamos al público la venta de la totalidad de las acciones de Agri-Corp en Industria San Francisco, S.A. Esta venta permitirá a Agri-Corp enfocarse más en categoría de productos clave como arroz, harina, sal y otros de consumo masivo. Además Agri-Corp ha obtenido una ganancia de capital por la venta de estas acciones. De igual manera, ha saldado las cuentas por cobrar a Industria San Francisco; las comerciales fueron pagadas por esta y las no comerciales fueron absorbidas con garantía de pago por el comprador. Todo ello beneficiará a Agri-Corp en su gestión operativa del negocio”, dice el comunicado divulgado por la empresa.
La venta de la avícola se concretó en julio de 2023 y gracias a los beneficios económicos que le generó a Agricorp, al cierre del tercer trimestre ya acumulaban 59.38 millones de córdobas en utilidades; es decir, cinco veces más que en todo el 2022. Esto permitió que en noviembre la Sociedad Calificadora de Riesgo Centroamericana (SCR) le cambiara la perspectiva de la calificación de negativa a observación.
“Esto es una mejora ya que antes estaba con una perspectiva negativa… La situación financiera mejoró porque saneó su balance al vender Industria San Francisco que arrastraba pérdidas”, dice un analista financiero que solicita omitir su identidad.
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Dueños inyectaron capital
Además, el analista explica que el informe es una radiografía de la empresa a noviembre y aunque establece como reto reducir el nivel de endeudamiento, la realidad es que este se mantiene estable con respecto a los años anteriores.
No está claro a cuánto ascendió la venta ni tampoco qué empresa adquirió dicho negocio.
Las calificaciones que tienen las distintas emisiones de la empresa están dentro del rango de buenas y según la calificadora SCR la perspectiva en observación refleja que “se percibe que la probabilidad de cambio de la calificación en el mediano plazo depende de la ocurrencia de un evento en particular”.
Sin embargo, la calificadora advierte en su informe: “El Consejo de Calificación otorga la perspectiva En Observación, a la espera de ver el impacto a nivel de balance y resultados de la venta de Industria San Francisco ejecutada en noviembre de 2023. Asimismo, se le dará seguimiento a la resolución que se tome con respecto a la contingencia fiscal que mantienen con la Dirección General de Ingresos (DGI) y el impacto a nivel patrimonial y en resultados que pueda tener”.
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En 2023 comenzó la mejoría
Durante el 2023 además de la venta de Industria San Francisco, Agricorp hizo otros esfuerzos para sanar sus finanzas. En agosto, reformó el pacto social para incrementar en 20 millones de córdobas su capital social a través de la recompra de acciones. Además, en noviembre su dueña, la sociedad Grain Hill Corporation, SA le inyectó 7 millones de dólares a través de la recompra de acciones, para garantizar que Agricorp cumpliera sus “obligaciones fiscales”.
El informe de la Sociedad Calificadora de Riesgo Centroamericana (SCR) detalla que a septiembre de 2023 la empresa contabilizó 5,270 millones de córdobas en activos (unos 144.26 millones de dólares), monto que aumentó en 4 por ciento anual y se mantuvo sin mayor variación al compararlo con el cierre del semestre previo. Mientras que las cuentas por pagar totalizaron 1,335.47 millones de córdobas (36.56 millones de dólares), monto que representa un incremento del 9 por ciento anual.
Las principales amenazas que enfrentó al empresa el año pasado fueron los menores márgenes del arroz, mayores impuestos sobre la renta en productos de consumo masivo no transados en bolsas agropecuarias, los efectos del fenómeno del Niño sobre el suministro de materia prima, la volatilidad en el precio mundial de los commodities, una política fiscal más restrictiva, que elevaría la carga impositiva y un panorama económico retador, a raíz de la situación sociopolítica que se vive en el país desde el 2018, las repercusiones por el conflicto de Rusia y Ucrania, y eventos adversos en el mercado internacional.
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La historia de Agricorp
La Corporación Agrícola SA inició operaciones el 1 de mayo de 2000, como resultado de la fusión entre las empresas comercializadoras de arroz, Comercial Centroamericana de Inversiones, SA (Comersa) e Industrias Nacionales Agrícolas (INA).
Aunque muchas personas asocian esta empresa con el asesor presidencial Bayardo Arce, en realidad lo que ocurre es que parte de la empresa pertenece a la familia de su esposa Amelia Ybarra, y tradicionalmente uno de sus familiares, Amílcar Ybarra, ha ejercido la presidencia y representación legal de la empresa.
Según el reporte de SCR, la Corporación Agrícola y sus subsidiarias son a su vez subsidiarias de Grain Hill Corporation, SA radicada en Panamá. Según el registro de empresas del país canalero, además de la familia Ybarra son accionistas de esa sociedad la familia Belli Alfaro, Rosales Lacayo, Palazio Hurtado, Novoa Yudice y Chamorro Solórzano.