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Policía Nacional

El periodista William Aragón contó que lo trasladaron al Chipote y posteriormente a la estación policial Ajax Delgado. LA PRENSA/Archivo

Opositores detenidos anoche fueron liberados, pero deben presentarse a firmar diariamente

El monitoreo Azul confirmó 57 detenciones: 22 mujeres y 35 hombres durante la noche del miércoles en diferentes departamentos del país

La dictadura de Daniel Ortega ejecutó la noche del miércoles y la madrugada de este jueves una cacería en contra de periodistas, opositores y activistas en diferentes departamentos del país. Fueron acusados, secuestrados, se les realizó audiencia y luego varios fueron enviados a sus casas bajo la condición de presentarse periódicamente a firmar.

El monitoreo Azul confirmó 55 detenciones: 22 mujeres y 35 hombres. Estas fueron en los departamentos de: Chinandega, Chontales, Estelí, Granada, Jinotega, Madriz, León, Managua, Matagalpa, Nueva Segovia, RACCN, RACCS y Rivas.

Todas las acusaciones fueron interpuestas entre las 5:00 de la tarde y pasadas las 6:00 de la tarde del miércoles 3 de mayo y todas tienen como víctima u ofendido al Estado de Nicaragua. Como ya es habitual, los opositores fueron acusados de “traición a la patria”, “propagación de noticias falsas”, y “alteración del orden público”.

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A firmar periódicamente

Los acusados que fueron dejados en libertad se tienen que presentar a firmar diariamente.

Uno de los detenidos fue el periodista William Aragón, quien fue capturado en su actual domicilio en Estelí. Relató que fue trasladado a Managua, donde primero fue llevado a la Dirección de Auxilio Judicial, mejor conocida como “el Chipote”, y después lo llevaron a la Estación policial Ajax Delgado, donde tuvo que hacer fila junto a un numeroso grupo de personas oriundas de Somoto, de donde él también es originario.

El periodista contó que en el microbús privado en que fue movilizado de Estelí a Managua habían otros dos ciudadanos detenidos. Iban custodiados por ocho agentes policiales y uno de Inteligencia que estaba a cargo del operativo.

“Había más de 250 camionetas allí que habían llevado gente de todas partes, porque era filón de gente que estaba allí, me llevaron allí, ya estando allí me pasaron con un juez, me pasaron con una gente de Somoto que la habían arrestado y allí el juez dijo que se daba una audiencia informativa. Habló el Ministerio Público que me acusaba por sedición, propagación de noticias falsas, exposición de personas al peligro y por atentar contra el Gobierno. Después nos dijeron que firmáramos un documento donde teníamos que presentarnos todos los días”, relató Aragón.

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El periodista dijo que le explicó al juez que él ya no vive en Somoto, sino en Estelí y viajar todos los días significaría un gasto de 120 córdobas diarios, pero el juez le dijo que agradeciera que no estará preso.

La misma Policía lo regresó a Estelí, a donde llegó a las 05:00 a.m. de este jueves 4 de mayo. El periodista manifestó que en general los policías lo trataron bien, no lo agredieron ni le gritaron, sin embargo, al momento que llegaron a su casa se llevaron su computadora, la de su hija y los teléfonos que encontraron.

Aragón fue acusado por la fiscal Yubelca del Carmen Pérez Alvarado. Entre los retenidos y acusados está la mamá del primer fallecido en las protestas de 2018 —Richard Pavón— Marycruz Bermúdez, originaria del municipio Tipitapa, Managua; el profesor Nelson Emilio Treminio, originario del municipio de Corinto, Chinandega; la opositora Teresa Mena, originaria de La Libertad, Chontales, entre los más conocidos por su activismo.

Estas detenciones ocurrieron el día que varias organizaciones conmemoraron el Día de la Libertad de Expresión. Desde el 2018, la dictadura de Ortega y su esposa, Rosario Murillo, no ha parado de asediar, perseguir y encarcelar a opositores, periodistas, abogados, empresarios e incluso sacerdotes. Estas tres nuevas detenciones se suman a una lista de 35 presos políticos, que son remanente de un grupo más numeroso que estaban detenidos, pero el pasado 9 de febrero, 222 presos políticos fueron liberados, expulsados del país y desnacionalizados.

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