Tras el anuncio del régimen de Daniel Ortega y Rosario Murillo, a través del Ministerio de Salud (Minsa), que Nicaragua ya no pedirá el resultado negativo RT-PCR de covid-19 como requisito de ingreso al país a partir de este jueves 16 de junio, se emitió este mediodía una aclaratoria para explicar los esquemas de vacunación que serán admitidos a partir de hoy a los viajeros que deseen ingresar a territorio nacional vía aérea, marítima o terrestre.
Tome nota:
- Tarjeta de vacunación con esquema completo de vacunación conformado por dos dosis anticovid de una misma vacuna o esquema combinado; en el caso de los fármacos Sputnik Light y J&J-Janssen, se admite su dosis única.
- Se aceptarán todas las vacunas aprobadas por la OMS y/o las admitidas y registradas en el país: Sputnik V, Sputnik Light, Pfizer, Moderna, Aztrazeneca, Covishield, Soberana II, Abdala, Sinopharm y Coviram.
- El comprobante que se solicitará para hacer constar la inmunización del viajero debe ser tarjeta de vacunación o certificado en físico o digital que indique la aplicación de las dosis requeridas de vacunas admitidas por Nicaragua. Cualquiera de estas dos opciones debe ser presentada a la entrada al país.
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“Las personas, niños o adultos que no hayan sido vacunados o que no tengan su esquema completo deben presentar la prueba PCR negativo”, recalcó además la primera dama de facto, Rosario Murillo, en su comunicación del mediodía con medios oficialistas donde también presentó la nota aclaratoria para el cumplimiento de la Resolución Ministerial 309-2022.
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El requisito de prueba PCR, de acuerdo con el comunicado del Minsa, fue establecido por el régimen Ortega Murillo en julio del 2020, cuatro meses después de que la covid-19 se estableció en Nicaragua, como una forma de control y monitoreo epidemiológico, pero los datos oficiales siempre fueron cuestionados por médicos independientes.
Además, el requerimiento de la prueba se convirtió en un obstáculo para el turismo internacional y para los nicaragüenses, así como en un negocio para el régimen que monopolizó y centralizó en el Minsa la posibilidad de acceder a este examen, bajo un costo de 150 dólares que se mantuvo como el más alto en la región, incluso a dos años de pandemia.