Las instituciones de microfinanzas están comenzando a ganar utilidades, luego de dos años consecutivos de pérdidas. Al menos eso es lo que muestran las cifras de la Comisión Nacional de Microfinanzas (Conami), que reflejan que en ese año estas entidades ganaron 9.98 millones de dólares. La Cámara de Microfinanzas (Asomif) admite que la industria está en vía de recuperación desde el último tramo del año pasado, pero señala que todavía siguen en negativo.
El Informe Anual del Banco Central de Nicaragua del año pasado muestra que pese a la pandemia del coronavirus, el microcrédito otorgado exhibió una dinámica positiva en el 2020. A diciembre de ese año, el saldo de cartera de crédito bruta totalizó 7,462 millones de córdobas, un incremento de 177.4 millones (2.4 por ciento) con respecto al cierre de 2019.
La presidenta de la Conami, Jim Madriz, declaró que en el 2018 las instituciones microfinancieras tuvieron pérdidas de 20.97 millones de dólares; en 2019 fueron 5.98 millones de dólares menos, pero en 2020 las utilidades fueron positivas, con 9.98 millones de dólares.
Las declaraciones las dio mientras presentaba el Informe de Gestión 2020 ante la Asamblea Nacional el recién pasado jueves. Son 49 instituciones las registradas en este órgano al 2020, de las cuales el 17 se registraron de manera voluntaria y en lista tienen 76 instituciones a las que les dan seguimiento para poderlas regular.
“Por la buena gestión que han hecho estas instituciones y por la buena gestión que hacemos en equipo, tuvieron utilidades de 9.98 millones de dólares”, reveló Madriz. “La evolución de índice de rentabilidad demuestra que tenemos resultados positivos”, agregó.
“Nosotros nos medimos con el Índice de Centroamérica y de Latinoamérica en lo que hace a microfinanzas, y Nicaragua está dentro de los niveles normales, a pesar de las adversidades, de las cosas que hemos vivido como país, las instituciones reguladas están operando, muy, pero muy bien”, remarcó la funcionaria de gobierno.
Entidades cumplen sus pagos externos
Las microfinancieras están cumpliendo sus pagos con los fondeadores internacionales y, a su vez, están colocando créditos, no tanto como acostumbraban. Lo que ha ocurrido es que los fondeadores externos están enfocados en apoyar a los países a detener la pandemia y ayudar a la población, pero lo otro que incide es el shock vivido en 2018, dijo.
No obstante, Madriz reconoció que los fondeadores internacionales están siendo cautelosos. “Ahorita, los fondeadores, cuando están prestando, hay un pago, el repago no está viniendo en un ciento por ciento, ni siquiera en el 60 por ciento, sino que están siendo cautelosos con las instituciones reguladas por la Conami”, precisó.
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Al 31 de diciembre de 2020 los ingresos totales de las instituciones reguladas por la Conami ascendían a 4,424.38 millones de córdobas, equivalentes a 127.05 millones de dólares, los cuales aumentaron en 4.35 millones de dólares con relación al año anterior, lo que representa un cuatro por ciento de crecimiento, asegura el Informe Anual de Gestión 2020 de esa institución.
“Les mencionaba que tenemos 49 instituciones registradas al cierre de 2020 (…) hay dos instituciones que tienen 37.22 millones de dólares, estas se registraron en la Conami, eran financieras, pero se registraron en la Conami, y su regulación con este regulador inició hasta enero de 2021”, dijo.
Esta adición de dos empresas que estaban adscritas a la Superintendencia de Bancos y Otras Instituciones Financieras (Siboif), elevó la cartera bruta de las microfinancieras miembros de Conami.
El informe del Banco Central apunta que el crédito de las microfinancieras dio buenas señales. “Presentó una recuperación a partir del tercer trimestre del año, reflejando una tasa de variación positiva de 2.4 por ciento en 2020 con respecto a 2019, así como una reducción en la mora”, señala. (Véase en la infografía).
Mejora la cartera de créditos y clientes
A partir de marzo de 2018 hubo una caída de las créditos y los clientes, pero esa caída se ha detenido desde agosto del 2020, aseguró la funcionaria.
Al 31 de diciembre de 2020, las Instituciones Financieras Intermediarias de Microfinanzas (IFIM) registran 380,527 clientes atendidos, los que tienen en sus manos 449,550 créditos activos, con un saldo de 8,922 millones de córdobas.
El 54 por ciento de los clientes atendidos son mujeres, equivalentes a 203,701. En cuanto al monto recibido por financiamiento, las mujeres adquieren el 45 por ciento de lo desembolsado por las IFIM, los hombres el 54 por ciento y el uno por ciento son créditos a personas jurídicas.
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Impacta incorporación de financieras
El presidente de la Cámara de Microfinanzas (Asomif), Julio Flores, explicó a LA PRENSA que Conami reporta crecimiento de la cartera porque agregó, en 2020, dos instituciones que estaban muy sólidas.
“Ellos están sumando instituciones nuevas pequeñas y además incorporaron a la Financiera Fundeser y a la Financiera Finca, que entre noviembre y diciembre pasado se registraron en la Conami y dejaron de ser supervisadas por la Siboif, en el caso de ambas la cartera es importante, solo Finca tiene una cartera de casi ocho millones de dólares”, explicó.
Asomif aglomera 20 instituciones, que son las más representativas del mercado.
Lo que registra Asomif
En 2020 la cartera de microfinanzas disminuyó, pero en menos proporción que en 2018 y 2019. “Fue una disminución desacelerada a pesar de la pandemia y le puedo decir con toda propiedad que el efecto de la Covid-19 en 2020, para efectos de cartera y de morosidad, la parte más fuerte fue en el segundo trimestre del año, pero a partir de agosto se observó una dinámica económica mayor y más actividad en colocaciones, de tal manera que el último trimestre del año fue el mejor para el sector bancario y de microfinanzas, lo que hizo que la cifra que se acumulaba hasta agosto y septiembre se revirtiera un poco”, refirió Flores.
Para Flores, lo más importante no es que la mora haya sido menor en 2020 que en 2019, sino evaluar cómo quedó la cartera en riesgo de las instituciones de microfinanzas, porque es la que da el elemento sobre el impacto de una crisis en la cartera, en la morosidad. Explicó que la mora solo es cuando una persona se atrasa por una cuota, pero la cartera en riesgo es cuando se tienen que reestructurar los plazos y hasta conceder meses de gracia para poder restablecer los pagos.
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“En el segundo trimestre del año la cartera en riesgo subió, y en el tercer trimestre también, pero después vino disminuyendo la cartera en riesgo. Pero hay que decir algo que muchas veces los medios no lo dicen o la gente no lo comparte, el hecho de que la economía nacional no la cerraron como en otros países hizo que la actividad económica se mantuviera, aún en años de pandemia”, acotó el representante de Asomif.
En el último tramo del año, hubo mayor normalidad
Señaló que el impacto en la actividad económica se vio más en el segundo trimestre porque los negocios y la gente por su cuenta, sin que el Gobierno se los dijera, cerraron parcialmente los negocios, o los cerraron por algunos días como en el caso del mercado Oriental, pero a partir de julio que pasó la primera ola de la pandemia, ya la gente comenzó a abrir sus negocias y ya el último trimestre del año fue casi normal.
El presidente de Asomif además declaró que cuando las personas tuvieron afectaciones en sus negocios y se les disminuyó su capacidad de pago, se les dieron plazos más amplios y se les adecuaron los préstamos a las condiciones de los clientes.
De acuerdo con Flores, el desempleo en Nicaragua, que se agravó desde 2018, lo que ocasionó fue más personas en la informalidad y menores ventas, pero al final las personas trataban de cumplir con sus cuotas en las financieras y eso ayudó a que no fuera un año drástico como lo fue el 2018 por razones de la crisis sociopolítica y 2019 por las reformas fiscales.
Además, dijo que las remesas ayudaron a que las personas mantuvieran el consumo y al final apoyaran a los pequeños negocios.
En 2020, el saldo de cartera de Asomif fue de 274.4 millones de dólares, colocados en 308 mil clientes. Eso los dejó 41.7 millones por debajo de lo logrado en 2019, cuando a su vez sumaban 360,624 clientes, expuso Flores.