Medios de comunicación de Rusia revelaron que la situación del proyecto de la planta de vacunas Mechnikov “está al borde del colapso”, al punto que la fábrica no estaría pagando salarios, impuestos y que no ha cancelado la deuda con la empresa Constructora Nicaragüense y Asociados (Coniasa), que fue la constructora que rehabilitó el antiguo edificio de Laboratorio Ramos, para que ahí funcionara la planta de vacunas.
El proyecto de la fábrica de vacunas Mechnikov fue financiado con 24.5 millones de dólares entre fondos del Instituto Nacional de Seguridad Social (INSS) y recursos federales rusos.
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Sin embargo, irregularidades en el proyecto incrementaron sus costos en 10 millones de dólares, reveló una investigación publicada por LA PRENSA entre enero y mayo de este año, lo que provocó que el proyecto se quedara sin recursos y estancando.
Life.ru, un reconocido portal de internet y cadena de televisión en Rusia, reportó el pasado 16 de octubre una nota sobre la planta Mechnikov en Nicaragua, en el marco de que el proyecto cumplió un año de haberse inaugurado este pasado 22 de octubre, y todavía no produce una sola vacuna.
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“Un año después de la apertura, una fuente de la Agencia Federal de Biología Médica le dijo a Life que la planta no funciona. El dinero no fue suficiente. La compañía Mechnikov ni siquiera puede pagar a su contratista (Coniasa). Los empleados de Mechnikov no reciben pago. La empresa no tiene dinero ni para pagar impuestos”, añade la publicación.
Coniasa es una constructora afiliada al Instituto de Previsión Militar (IPSM) del Ejército de Nicaragua. LA PRENSA consultó a la constructora sobre el reporte de la revista, pero en la empresa dijeron que no podían brindar información sobre este tema. De acuerdo con Life, a la constructora se le adeuda un poco más de un millón y medio de dólares por el proyecto.
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“La empresa no tiene dinero para la línea de envasado. Debido a las deudas con el contratista, Mechnikov no tiene permiso para poner en funcionamiento la planta. Por lo tanto, ahora simplemente es imposible conectar redes de ingeniería, obtener la certificación e iniciar la planta. La empresa está amenazada con bloquearle cuentas en bancos. Además existe el riesgo de que todo el personal se disperse y estos son especialistas calificados, sin los cuales es imposible iniciar la planta”, dijo la fuente al portal Life.