Durante una nueva reunión en la sesión ordinaria del Consejo de Derechos Humanos la mayoría de los países hicieron un llamado a un diálogo como medida para restaurar la democracia en Nicaragua y solicitaron que el Grupo de Expertos en Derechos Humanos sobre Nicaragua (GHREN), del Consejo de Derechos Humanos de las Naciones Unidas, continúe con su labor y le sea permitido su ingreso a suelo nicaragüense.
La delegación de la Santa Sede (Vaticano) mostró su preocupación por la persecución y violaciones de derechos fundamentales a periodistas, defensores de derechos humanos y la Iglesia católica.
“Esta delegación desea hacer eco del llamado del papa Francisco a que se superen las hostilidades y se busquen espacios para el diálogo constructivo entre las partes, sentando las bases para el retorno a una coexistencia pacífica sobre la base del respeto de la dignidad y derecho de todas las personas, en particular las que están en situación más vulnerable, que se ven afectadas desproporcionadamente por las actuales circunstancias.
Finalizó haciendo un llamado a la “apertura de corazones” para la “búsqueda sincera de la paz”.
Marcelo Eliseo Scappini Ricciardi, de la delegación de Paraguay, indicó que su país está “consternado” por los resultados del informe del Grupo de Expertos, que da cuenta de graves y sistemáticas violaciones y abusos de derechos humanos, “que de acuerdo a ellos podrían constituir crímenes de lesa humanidad”.
“En Nicaragua existe una crisis multidimensional que debe ser resuelta por todos los medios, preferentemente por la vía del diálogo”, agregó.
Consejo escucha voces de víctimas
En esta nueva reunión el Consejo de Naciones Unidas escuchó las voces de organizaciones afectadas en Nicaragua y testimonios de víctimas como Lesther Alemán, ex preso político, desterrado y despojado de su nacionalidad, en nombre de Aula Abierta y la Alianza Universitaria (AUN).
“Continúa la represión y cercenar los derechos a la libertad de reunión pacífica, de expresión, académica y sus perpetradores continúan en la impunidad. Por tanto les solicitamos a que se le exija al Gobierno de Nicaragua: cese el ataque en contra de los universitarios; se investigue y sancione las violaciones a los derechos humanos; y se implementen medidas para la verdad, reparación, justicia y no repetición de los crímenes que se han cometido en Nicaragua”, afirmó Alemán.
Una de las voces de los pueblos indígenas fue la de Becky Jefferaine McCray Urbina, de Réseau International des Droits Humains (RIDH), quien indicó que el régimen afecta su soberanía alimentaria.
“Los colonos armados invaden nuestros territorios con el consenso del Estado que no ha tomado medida para garantizar el saneamiento del territorio y la protección de nuestros derechos. Esto ha generado los asesinatos impunes de al menos 67 indígenas. El despojo de grandes extensiones de nuestro territorio afecta nuestra forma de vida y soberanía alimentaria”, remarcó.
Asimismo, se escuchó la intervención de Josefa Meza, madre de Jonathan Morazán, uno de los asesinados en la marcha del 30 de mayo. “El asesinato de nuestros hijos fue el regalo que las autoridades nos dieron a las madres nicaragüenses”, y remarcó que el asesinato de su hijo y de más de 350 personas siguen impunes.
¿Cómo debe ser la renovación del mandato?
Jan-Michael Simon, solicitó la renovación del mandato del Grupo de Expertos por un período de dos años.
“Dada la situación actual en Nicaragua, sería razonable promover nuestro mandato por un período de dos años. Dada la evolución dinámica de las violaciones y crímenes en curso en Nicaragua también sería razonable además de la presentación de informes escritos que presente actualizaciones periódicas sobre las gestiones de crímenes en curso y la impunidad con miras a la rendición de cuentas y la justicia para las víctimas”, afirmó Simon.
Indicó que el mandato renovado debe estar acompañado con recursos para cumplir con la tarea que se les asigna.
Cuba llama abiertamente “gobierno sandinista” ante la ONU
Pocos países como Venezuela, Irán, Rusia y Cuba —este último llamó al “gobierno sandinista de Nicaragua”— mostraron su respaldo a lo actuado por Daniel Ortega y Rosario Murillo.
“Ratificamos nuestro invariable apoyo al gobierno sandinista y al pueblo de Nicaragua, que continúan trabajando sin descanso en favor del desarrollo sostenible, la paz, la justicia, el bienestar y la emancipación social”, afirmó Roberto Soto Martínez, de la delegación cubana.