Monseñor Rolando Álvarez, obispo de la Diócesis de Matagalpa y administrador apostólico de Estelí, inició su quinto día de “casa por cárcel” sin ningún contacto con el exterior. Desde el jueves reciente, que la Policía del régimen le impide salir de la curia episcopal donde permanece junto con cinco sacerdotes y seis laicos, el grupo se mantenía conectado con el exterior a través de las redes sociales, pero desde el domingo esta comunicación cesó.
Según fuentes cercanas al obispo, las 12 personas que la Policía mantiene retenidas están bien. Sin embargo, no contestan llamadas ni mensajes porque temen que sus teléfonos estén intervenidos como parte de la supuesta investigación que la Policía —según anunció a través de un comunicado— está realizando. Es por ello que han restringido al mínimo la comunicación con el exterior y solo informan de su estado a personas de confianza.
Hasta ahora no se conoce que exista caso judicial abierto, pero desde el miércoles pasado se reanudó el asedio policial al obispo. El jueves se impidió el ingreso de personas a la residencia y más tarde le impidieron a monseñor Álvarez trasladarse a la Catedral para celebrar la eucaristía.
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Policía anuncia “retención”
El viernes, después que la vocera oficial y primera dama Rosario Murillo en su discurso diario del mediodía acusó indirectamente al obispo de cometer “delitos de lesa espiritualidad”, la Policía anunció a través de un comunicado que lo estaba investigando y decidió arbitrariamente mantenerlo “retenido” junto con sus 11 acompañantes. Esto, a pesar de que, según las leyes locales, la figura de casa por cárcel solo puede ser ordenada por un juez en medio de un proceso judicial
Durante el fin de semana se incrementó la presencia de policías y de agentes de la Dirección de Operaciones Especiales (DOEP) conocidos como antimotines. Además, bloquearon con patrullas las puertas del edificio para impedir el acceso.
Personas cercanas a la Diócesis de Matagalpa, bajo condición de anonimato, confirmaron a LA PRENSA que las 12 personas están bien y que aún tienen comida, ya que monseñor suele surtir su despensa para varios días. Sin embargo, a excepción de él que está en su casa, las otras 11 personas permanecen con la misma ropa que llevaban el jueves cuando ingresaron al recinto.
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Cesaron las transmisiones a través de las redes sociales
Durante los primeros tres días las plataformas de la Diócesis de Matagalpa transmitían en vivo la eucaristía que Álvarez celebraba al mediodía y por las noches transmitían la cantata que él anunció se realizaría diariamente. Pero desde el fin de semana esas transmisiones en vivo cesaron.
Este lunes al mediodía no se transmitió la eucaristía que Álvarez dijo que celebraría mientras lo mantuvieran retenido, tampoco hay invitaciones para la transmisión de la cantata que realizaron durante las dos primeras noches. Se desconoce si el servicio de internet ha sido interrumpido en la residencia
Mientras tanto, el despliegue policial sigue creciendo, a pesar de las incesantes lluvias que se han registrado en esa ciudad desde el domingo. La Policía mantiene retenes en las cuatro esquinas de donde se ubica la sede de la curia. El edificio sirve de residencia del obispo, pero allí también funcionan las oficinas de la Diócesis.
El domingo por la noche, en medio de la lluvia se registró un apagón en el sector de la “calle de los bancos” donde se ubica la curia. A través de las redes sociales algunos pobladores expresaron su temor de que se hubiera cortado la luz, sin embargo, a los pocos minutos se restableció el servicio.
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