Lo que hizo el muchacho de 22 años nacido en Estados Unidos, Jesse Rodríguez, el pasado fin de semana sigue teniendo eco en el mundo del boxeo. No era nada fácil ganarle y aún más noquear a un tipo como Srisaket Sor Rungvisai. El peleador tailandés, a pesar de sus 35 años, demostró rapidez de brazos y un gran sentido de la ofensiva, pero fue acabado por la juventud, velocidad, movimientos de piernas y de cintura, además de combinaciones certeras y constantes.
A pesar que Juan Francisco “el Gallo” Estrada parece retractarse del combate contra Joshua Franco y ahora quiere la trilogía contra Chocolatito en noviembre, el combate más fácil en este momento de realizar es entre Román González y Jesse Rodríguez por muchos factores: Rodríguez y Chocolatito son peleadores del mismo promotor, el japonés Akihiko Honda, es quien maneja los hilos de ambos pugilistas y en 2016 cuando González enfrentó a Carlos Cuadras (quien también pertenecía al nipón) demostró que con solo una orden se podía montar ese combate; otro punto a favor es que tanto el nicaragüense como el norteamericano comparten la misma plataforma promotora de organizadora de eventos como es Matchroom Boxing en Estados Unidos y a la misma vez utilizan la misma vía de transmisión de sus peleas como es DAZN, en otras palabras, para que suceda Chocolatito vs. Rodríguez, solo debe haber un “ok” de los peleadores y la avalancha seguirá su rumbo.
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No obstante, está un factor nuevo y determinante como es el impacto del momento y Rodríguez lo tiene, es el peleador sensación con su historia de ser un 108 libras que aprovechó una oportunidad en las 115 libras y ahora se podría convertir hasta en el nuevo rey si vence al nicaragüense. Ya el promotor Eddie Hearn dio el visto bueno para esa pelea con los guiños en la conferencia de prensa, DAZN hasta publicó una nota en su cuenta oficial diciendo: ¿Debería ser Chocolatito el siguiente rival de Rodríguez? Y en la nota el mejor especialista de la plataforma, Chris Mannix, indicó que la pelea contra el nicaragüense es la más importante.
Todavía hay muchas cosas por revelar en el impredecible mundo del boxeo. El Gallo deberá tomar una decisión clara o abandonar uno de sus dos títulos, Jesse Rodríguez deberá elegir si continúa en las 115 libras o baja a las 112, mientras que González aún está pensando qué opción le conviene más económicamente si Estrada, Rodríguez o hasta el mismo Ioka. El tiempo lo dirá, lo que si es una realidad es que González aún con 35 años sigue siendo el común denominador de los pesos pequeños.