A medida que avanza el proceso judicial contra Hermógenes Crescencio Blanco, de 58 años, y Sheyla Méndez Bonilla, de 22, por femicidio en perjuicio de Vilma Elena Méndez, de 40, se conocen nuevos detalles que comprometen a la hija de la víctima.
Esto porque en la audiencia inicial celebrada este miércoles en el Juzgado Distrito Penal Especializado en Violencia y Adolescencia de León salió a relucir que Sheyla Méndez ayudó a meter el cadáver de su madre en el saco color rojo en el que fue semienterrada en el patio de la casa de Hermógenes Blanco ubicada en la calle 9 del barrio Sonrisa de Dios, en Nagarote.
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Así lo llegará a decir al juicio Blanca Azucena Méndez, hermana de Vilma Elena. Según la acusación de la Fiscalía, Hermógenes Blanco estranguló con un mecate a la víctima y luego la decapitó con un machete, la noche del 5 de diciembre del 2021.
Blanca Méndez se enteró que su sobrina (Sheyla Méndez) ayudó meter en un saco a su madre, porque la acusada se lo confesó el 31 de diciembre de 2021, cuando ella le preguntó por el paradero de su hermana, quien desapareció de manera misteriosa el día 5 de ese mismo mes.
“Ya le dije que mi mamá no va a volver porque Hermógenes la mató, la metió en un saco rojo, y yo ayudé a meterla en el saco”, habría dicho la acusada a su tía.
No le creyó
Sin embargo, Blanca Azucena Méndez no le creyó en ese entonces a su sobrina, según el intercambio de información y pruebas ofrecidas por el Ministerio Público.
En términos similares está propuesta la declaración de Claudia Rueda Méndez, sobrina de la víctima, quien denunció la desaparición de su tía en la red social Facebook el pasado 21 de marzo y al día siguiente en la Policía de Nagarote.
Vilma Elena Méndez permaneció como desaparecida desde el 5 de diciembre de 2021 cuando salió de su casa en la calle 6 del barrio antes mencionado.
Al momento del hallazgo, el cuerpo de Vilma Elena Méndez estaba dentro de un saco rojo, menos su cabeza que estaba a un lado, según el testimonio de policías y la médico forense que están ofrecidos como testigos.
Más pruebas
En el juicio programado para el próximo 23 de mayo, la Fiscalía también aportará como prueba el testimonio de Julio César Gutiérrez, cuñado de Vilma Elena Méndez, quien declarará ante la autoridad judicial que él presenció en varias ocasiones a Sheyla Méndez dar maltrato físico y verbal a la víctima.
El mismo testigo dirá en juicio que Hermógenes Blanco y Sheyla Méndez tenían una relación de pareja y que el acusado de femicidio en calidad de autor primeramente convivió maritalmente con la víctima.
Julio César Gutiérrez también expondrá en juicio que Sheyla Méndez le expresó que su mamá estaba muerta y que la casa le había quedado a ellos y no permitiría que ninguna familiar llegara a vivir a la vivienda forrada con zinc.
Complementa la oferta probatoria del órgano acusador el dictamen médico legal donde se confirma que Vilma Elena Méndez fue estrangulada y decapitada, y que al momento del hallazgo de la osamenta tenía aproximadamente tres meses y 17 días de fallecida.
Sugiere demencia
El defensor público Eduardo Benito Altamirano, quien ejerce la defensa de los imputados, pidió que Hermógenes Blanco y Sheyla Méndez sean examinados por un psicólogo forense.
“Pido que mis representados sean examinados por un psiquiatra o psicólogo forense para determinar su estado psíquico”, indicó el defensor público, quien se opuso a la decisión del juez Luis Felipe Alvarado Palma de mandar a juicio a los dos acusados.
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El defensor público también alegó que no existen “pruebas suficientes” para que en juicio el órgano acusador demuestre la culpabilidad de sus representados.
Resolución judicial
El juez Luis Felipe Alvarado, quien ratificó la prisión preventiva para los dos acusados, señaló que aunque no existen testigos de los hechos acusados por la Fiscalía, sí hay elementos indiciarios para mandar a juicio a Hermógenes Blanco por femicidio en calidad de autor y a Sheyla Méndez como cómplice.
Entre los elementos indiciarios que guardan relación con la acusación fiscal está la confesión del crimen que Sheyla Méndez hizo a sus parientes de haber ayudado a Hermógenes Blanco a sepultar a la víctima, de quien era hija única.
Además del hecho que la víctima fue encontrada enterrada en la casa habitada por los acusados tres meses después que ellos la reportaron como desaparecida. En la propiedad también fue hallado el machete utilizado para decapitar a la víctima y que le fue ocupado al presunto femicida.
Sobrina exige justicia
Al concluir la audiencia inicial, Claudia Rueda Méndez, sobrina de Vilma Elena Méndez, exigió que el crimen de su tía no quede en la impunidad. “Yo le pido señor juez se haga justicia para mi tía, porque ella no merecía morir de esa manera, ella fue madre y padre para Sheyla (Méndez)”, expresó Claudia Rueda.
Seguidamente la mujer que está ofrecida como testigo por la Fiscalía, señaló que no hay motivos para que su prima justifique el crimen, porque la casa de la víctima —motivo por el cual presuntamente la mataron— sería de ella por ser hija única.