De la mano de la reactivación de la economía mundial, el sector textil y confección ha comenzado a dar signos de recuperación, mucho más rápido de lo que se esperaba. En los primeros cinco meses del año Nicaragua ha logrado enviar a Estados Unidos, su principal mercado, el equivalente a 704 millones de dólares, según las estadísticas de la Administración de Comercio Internacional (Otexa, por sus siglas en inglés). Y si bien es una recuperación robusta, esta se ralentiza si se compara con el 2019, previo a la crisis, cuya expansión ronda el cinco por ciento.
Entre enero y mayo del año pasado las maquilas nicaragüenses percibieron 524 millones de dólares, y ahora al mismo tiempo acumula 704 millones, 180 millones de dólares más que en el mismo periodo del 2020. De tal manera que se observa un crecimiento en valor de 34.2 por ciento.
Solo en mayo las maquilas percibieron 146.26 millones de dólares, 83.3 millones de dólares más con respecto a igual mes del 2020, cuando el sector generó 62.93 millones. Cabe destacar que para entonces la pandemia comenzó a golpear al principal socio de Nicaragua, Estados Unidos, que este año ha acelerado su recuperación a base de un masivo programa de vacunación, lo que ha reactivado el mercado interno.
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Dean García, director ejecutivo de la Asociación Nicaragüense de la Industria Textil y de la Confección (Anitec), dijo que el sector ha evolucionado mejor de lo que se esperaba, de tal manera que es posible que se logre ver un crecimiento con respecto al 2019, un año que fue bueno para el sector.
“Para nosotros, estas cifras son positivas con respecto a lo que se había planteado a inicios de este año y eso es por efecto de la recuperación de la economía de Estados Unidos, que es lo que está impactando de forma positiva; creemos que esa tendencia va a continuar. Nosotros esperamos finalizar con un crecimiento entre un ocho y diez por ciento con respecto al 2020, hay que tomar en cuenta que nos estamos comparando con un año que no fue bueno, y por eso es que usted ve ese crecimiento del 30 por ciento, porque el año pasado entre marzo y mayo nuestras exportaciones se bajaron un 50 por ciento, entonces obviamente al comparar los resultados van a ser bastante altos. Para hacer una comparación bastante neutral, sería con el 2019 y con respecto a ese año podemos andar en un cinco por ciento de crecimiento, que no es malo”, dijo García.
El 2020 fue uno de los peores años para el sector, puesto que debido a la pandemia la mayoría de las tiendas en Estados Unidos cerraron, lo que ocasionó que se redujeran las órdenes de compras en Nicaragua y, en consecuencia, muchas empresas suspendieron temporalmente sus operaciones y más de 20 mil perdieron su empleo, que luego recuperaron gradualmente.
“Acá lo importante es que va a haber un crecimiento del sector a como había proyectado a inicios del año, vamos a ver una recuperación del sector”, resaltó García.
Por su parte, el secretario de la Confederación Sindical de Trabajadores de Zonas Francas (CST-ZF), Pedro Ortega, manifestó que este año el sector espera percibir un poco más de 1,500 millones de dólares en exportaciones textiles. “Creo que este año vamos a crecer un 15 por ciento con respecto al año pasado y si hacemos la comparación con el 2019, vamos a ver un crecimiento del siete por ciento”, estimó.
El sector textil y confección de Nicaragua cerró el 2020 con una caída de 21.55 por ciento respecto a 2019, lo que significó que la economía no recibió 390.82 millones de dólares en ingresos por exportaciones de estos productos hacia Estados Unidos, su principal socio comercial. Las exportaciones a este destino al cerrar el año sumaron 1,397.73 millones de dólares, según Otexa.
Mayor volumen de exportaciones
En cuanto a volumen, Nicaragua envió a Estados Unidos 226.82 millones de metros cuadrados equivalentes en prendas durante los primeros cinco meses del año, un aumento del 34.32 por ciento con respecto a los 168.86 millones de metros enviados en igual periodo en 2020. Pero solo en mayo envió 46.5 millones de metros, similar a lo enviado en ese mes el año pasado.
Según datos del Banco Central de Nicaragua (BCN), hasta abril de este año se contabilizaban 120,110 empleados en el régimen de zona franca y en diciembre esa cifra andaba en 119,023 empleados, es decir que en los primeros cuatro meses del año se contrataron 1,087. Dentro de este régimen especial arancelario, operan principalmente las empresas dedicadas a la confección textil.
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“Estamos esperando recuperar el empleo que perdimos con la crisis del Covid, hay expectativas de crecimiento, pero queremos ser bastante conservadores en este punto, por efecto de que las inversiones que se están llevando a cabo son de ampliaciones de plantas existentes”, aclaró García.
Por su parte, Ortega considera que es posible que se logre recuperar el empleo perdido con la pandemia, el cierre de tres textileras a inicios de año y adicionalmente ganar más de cinco mil nuevos empleos este año.
“Creo que ya recuperamos el empleo perdido en el 2020 y vamos con perspectiva de que vamos a cerrar este año con más de 5 mil nuevos empleos en zona franca, esto con las ampliaciones y las nuevas empresas que se han propuesto (empezar operaciones) en octubre, más la textilera de China que está operando en Mateare”, añadió.
Comportamiento en la región
Los datos de Otexa también revelan que a la región no le ha ido mal. Por ejemplo, El Salvador logró captar 714 millones de dólares hasta mayo, superior un 57 por ciento, cuando en igual tiempo percibió 454 millones.
Honduras en el lapso antes señalado captó 982 millones de dólares, frente a los 616 millones de igual tiempo en 2020. Eso implica un crecimiento de 59 por ciento.
En el caso de Guatemala, durante los primeros cinco meses percibió 619 millones, mayor a los 455 millones de igual tiempo el año pasado, para un aumento del 36 por ciento, similar al de Nicaragua.
El único país que retrocedió un 34 por ciento fue Costa Rica, al percibir hasta mayo del corriente 4.42 millones de dólares, inferior a los 6.74 millones captados el año pasado.