La Cámara Nacional de Turismo (Canatur) confirmó a LA PRENSA que tampoco las aerolíneas de Estados Unidos que tenían planes de retornar en abril, vendrán en ese mes y señaló que el Gobierno de Daniel Ortega continúa sin cambiar su posición respecto a las medidas biosanitarias que impuso y que están dificultando el retorno pleno de las líneas aéreas, lo que mantiene en vilo al sector turístico nicaragüense.
La presidenta de Canatur, Lucy Valenti al ser consultada por este Diario sobre el retorno de American Airlines y United Airlines el próximo mes respondió: “No vienen…se mantiene lo mismo”, es decir continúa la política de postergar mes a mes las fechas tentativas de reconexión, completando así un ciclo de un año desde que estas compañías de vuelos suspendieron conexiones a causa de la pandemia, pero que en Centroamérica han retomado operaciones una vez que los gobiernos de la región han relajado sus medidas de control sanitario, con excepción de Nicaragua.
El régimen de Daniel Ortega, que es el que menos medidas para reducir la expansión del virus Covid-19 a nivel interno ha adoptado en Centroamérica, sino que más bien promueve acciones para que este se esparza con rapidez entre la población, en el caso de las medidas adoptadas para el retorno de las aerolíneas son únicas en Centroamérica.
“El gobierno mantiene su posición de no flexibilizar”, dijo Valenti al ser consultada sobre una reunión que supuestamente las aerolíneas iban a sostener con autoridades del Instituto Nacional de Aeronáutica Civil (INAC), como dijo a este Diario el presidente de la Cámara Nicaragüense de la Micro, Pequeña y Mediana Empresa Turística (Cantur), Leonardo Torres.
“Entiendo que American mantiene su fecha de retorno y hasta está vendiendo boletos para abril, entonces eso te da un poco de certidumbre, yo entiendo que ellos iban a hablar con el INAC (Instituto Nacional de Aeronáutica Civil) para ver si se relajan las medidas”, dijo Torres.
De confirmarse la posición de las aerolíneas de Estados Unidos, se sumarían a la decisión ya adoptada por Aeroméxico, que informó a las agencias de viajes que ya no retornaría en abril sino hasta mayo. Se esperaba que la mexicana volviera el 1 de abril, pero la nueva fecha tentativa de retorno es el 6 de mayo, mientras que en otros países de la región centroamericana esta línea aérea ya reanudó sus operaciones.
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Las agencias de viajes Aeromundo confirmó el cambio de fecha de Aeroméxico, pero hasta ayer por la noche mantenía que American Airlines viene el 2 de abril y United en el mismo mes, sin definir fecha. La situación más compleja es con Spirit, la aerolínea de bajo costo que ya está operando en la región, pero que en el caso de Nicaragua ni siquiera tiene fecha tentativa de retorno.
Pero otro elemento que citó Valenti es que también la exigencia de una prueba de PCR que el régimen de Ortega mantiene en Nicaragua es una medida que no es eficaz en la lucha contra la pandemia. Para ello, ejemplificó la situación en Costa Rica, que para ayudar al sector turismo en su reactivación decidió quitar ese requisito de ingreso vía aéra.
“El ministro de turismo de Costa Rica nos informó en la última reunión para demostrar el casi nulo impacto de propagación del virus como consecuencia de haber quitado las pruebas de covid a pasajeros llegando a Costa Rica por vía aérea que de septiembre a febrero habían ingresado a Costa Rica vía aérea 188,000 turistas y que de esos solo el 0.12 por ciento habían tenido síntomas de Covid”, dijo Valenti, cuyo dato calificó de interesante.
El régimen de Ortega solicita a las aerolíneas enviar lista de sus pasajeros con resultado negativo de las pruebas PCR a las autoridades de Aeronáutica Civil y el Ministerio de Salud, además exige resultados de la prueba a la tripulación de las aerolíneas, única en la región.
El presidente de Cantur se había mostrado confiado ayer en que las aerolíneas de Estados Unidos iban a retornar en abril, porque estaban ofreciendo sus boletos con conexión a Managua, sin embargo, lo cierto es que en semanas recientes Carlos Schutze, presidente de la Asociación Nicaragüense de Agencias de Viajes y Turismo (Anavyt) y vicepresidente de la Cámara Nacional de Turismo de Nicaragua (Canatur), explicó que el principal inconveniente con las líneas aéreas estadounidenses en Nicaragua es el requerimiento de la prueba de Covid-19 a la tripulación, puesto que va en contra de las leyes de privacidad de Estados Unidos.
Desde junio del año pasado las aerolíneas han estado cambiando sus fechas de retorno y estas suelen ser tentativas, es decir que pueden cambiar en cualquier momento. Esto a pesar que Nicaragua fue la primera en el istmo en reabrir en julio del año pasado su aeropuerto internacional, el que pasó durante varios meses semiparalizado, con apenas la operación de Conviasa, que luego también se retiró este año. Avianca retomó vuelos asfixiada por la crisis económica que ya arrastraba desde antes de la pandemia y Copa Airlines volvió este año con vuelos limitados.
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