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Los 20 mil millones de córdobas que el Gobierno pretende incorporar al Presupuesto General de la República 2021, lejos de estimular una inflación, vendrán a dinamizar a las actividades económicas, consideraron ayer economistas, que recordaron que esa masa de dinero entrará a un mercado donde la demanda está deprimida, además de los efectos que aún se esperan por la crisis económica mundial.
El economista Néstor Avendaño aseguró que el único riesgo latente es que haya una deflación, es decir, una caída de precio en el consumidor de la cual es muy difícil salir, como le ha ocurrido a Japón en las últimas dos o tres décadas.”No hay una fuerte presión inflacionaria porque se ha desplomado la demanda interna de bienes y servicios en Nicaragua, esa demanda deprimida está en vigor desde el año 2018″, atajó.
Avendaño recuerda que en 2019 debido al efecto de la reforma tributaria – que no era aconsejable hacerla- la inflación se elevó hasta el 6.1 por ciento. “En los últimos tres años, aún con crisis el 2018 y 2020 son años en donde se demuestra que la inflación está baja en Nicaragua, eso se debe a que los consumidores gastan menos, ahorran previendo situaciones económicas futuras más complejas y los empresarios invierten menos, debido a la incertidumbre política y económica en nuestro país”, manifestó.
Además, a esto se suman las sanciones financieras internacionales en contra de Nicaragua, las que afectan el crecimiento económico. Precisamente es en ese contexto que entrarán a la economía los 20 mil millones de córdobas al gasto público, que serán invertidos en un paquete de proyectos que el Gobierno va a impulsar para reactivar la economía y ejecutar proyectos de infraestructura, según dijo este lunes el titular del Ministro de Hacienda y Crédito Público (MHCP), Iván Acosta en un medio de propaganda del orteguismo.
Solo el Ministerio de Transporte e Infraestructura se espera elevar su cartera de 9,700 millones de córdobas a 13,000 millones de córdobas. Además van a ejecutar proyectos en el sector agropecuario, de construcción de viviendas, salud, educación, entre otros, luego que el Gobierno consiguiera en el 2020 contratar 966 millones de dólares con la cooperación internacional.
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Avendaño recordó que en los últimos tres años el Banco Central de Nicaragua ha mantenido una política monetaria muy contractiva, con la finalidad de defender las reservas internacionales, la que han acompañado de una política fiscal también contractiva, y ahora buscan reactivar el crecimiento canalizando dinero vía inversión pública, lo cual puede ser posible.
“En un escenario internacional donde las tasas de interés se han desplomado, con más razón no va a haber un impacto inflacionario, por un mayor déficit fiscal debido a que el servicio de la deuda pública vaya a subir , porque las tasas internacionales están al cero por ciento”, sostuvo.
Eso sí, el economista advierte que “siempre y cuando el aumento el gasto público sea aplicado a la inversión pública va a generar crecimiento económica y no va a provocar fuerte presión inflacionaria”.
Asimismo, Avendaño reconoce que este movimiento de flujos de dinero de la cooperación internacional para ejecutar proyectos de reactivación económica en 2021 favorece políticamente al partido de Gobierno y sus aliados en un contexto electoral.
Habrá estabilidad cambiaria
Otro factor positivo de estos recursos que están llegando del exterior es que Nicaragua se aleja de una crisis en su sistema cambiario, porque una masa importante de recursos que adquirirá el Estado de Nicaragua apuntalará las Reservas Internacionales, explicó un economista que prefiere no ser citado por su nombre.
“El problema con las reservas internacionales es que debido a los déficit del INSS y otras instituciones, el Gobierno está teniendo que retirar parte de sus depósitos en el BCN y eso tendía a que se cayeran en 2021 y podría poner en riesgo el actual sistema cambiario, pero eso ya desaparece y lo más probable es que va a haber una recuperación fuerte en las Reservas Internacionales”, precisó.
Sin conocerse aún con exactitud cómo se distribuirán los 20 mil millones de córdobas en el gasto público, el economista se atreve a decir que en principio todo apunta a cierta recuperación de la actividad económica, un aumento en la demanda agregada. Al igual que Avendaño descarta una espiral inflacionaria, porque esta se produce cuando la economía está trabajando en plena capacidad o cerca y se aumenta el gasto.
Los empleos formales e informales también se podrán recuperar un poco, agregó, pero en mayor medida el informal, por ser el que predomina en la economía nicaragüense.
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Conimipyme: se trata de una política expansiva
La decisión de incrementar el gasto público por parte del Gobierno de Nicaragua, obedece a una política expansiva, aseveró Leonardo Torres, presidente del Consejo Nicaragüense de la Micro, Pequeña y Mediana Empresa (Conimipyme) y también economista.
Torres señaló que en el caso de las mipymes se deberían ver beneficiadas con los programas de financiamiento que mencionó Acosta en su intervención en la televisión. Las pymes esperan “que hayan políticas de créditos para los sectores priorizados, como por ejemplo, apoyar al turismo que ha estado muy golpeado, apoyar la generación de empleo o mayor incremento de los niveles de producción y comercio de nuestras empresas”, dijo.
Sostuvo que cuando se toman políticas expansivas en la economía lo que se trata de hacer es estimular el consumo.”Hay más dinero en la economía, entonces se trata de introducir más dinero de lo que se tenía proyectado hacer, entonces habrá más circulante en la economía, la tendencia es estimular las ventas, y por lo tanto el crecimiento económico del país”, detalló.
Para Torres puede haber cierta presión inflacionaria, pero señala que si esa circulación de dinero se hace de forma ordenada y regulada, tomando en cuenta que Nicaragua tiene niveles bajo de inflación, “nos podemos dar el lujo de tener tasas un poquito más altas de inflación, pero que no signifiquen poner en peligro la economía del país, entonces eso es correcto hacerlo”.
Al final Torres manifestó que de nada sirve mantener tasas de inflación baja si se está contrayendo la economía, de tal manera que esta política expansiva permitirá crecimiento del PIB y también a un crecimiento de la inflación.
Comercio: positivo, pero insuficiente
El comercio también cree que habrá una mejora, pero considera que aún no es suficiente. La presidenta de la Cámara de Comercio y Servicios de Nicaragua (CCSN), Carmen Hilleprandt, declaró que esa inyección de dinero al gasto público permitirá una mejora económica, pero insiste en que la empresa privada debe tener beneficios también, y uno de estos debería de ser hacer una revisión a la Ley de Concertación Tributaria.
Precisó que solo en el sector comercio y servicios se han perdido 70,000 empleos y que para subsanar esa brecha de menores inscripciones al INSS se deben hacer las evaluaciones como la antes mencionada para crear más empleos.
Favoritismo con base social de Ortega
Y si bien se espera un impacto positivo en la economía, hay sectores que ha recibido con escepticismo el anuncio, sobre todo cuando se habla de cómo se va a repartir, a quienes se va a beneficiar en cada proyecto. Al respecto, el sociólogo y economista Óscar René Vargas, considera que el régimen va a emprender proyectos favorables a su base social, darle empleo a sus seguidores, ofrecer trabajos a los empresarios pequeños y medianos y oportunidades de ganancias a los grandes empresarios al incrementar el consumo interno.
Los bancos, también, se van a beneficiar al incrementar el crédito y posiblemente sus ganancias. También admite que la macroeconomía va a tener un crecimiento positivo, se rompen los tres años de contracción económica, se va a reactivar el sector de la construcción, las ferreterías, etcétera.
Vargas considera que el Instituto Nicaragüense de Seguridad Social (INSS) va a incrementar el número de afiliados, precisamente por una mejora en la generación de empleo. La inyección del dinero de los préstamos y donaciones, cerca de mil millones de dólares, va a favorecer a Ortega en un año electoral, advierte.