14
días
han pasado desde el robo de nuestras instalaciones. No nos rendimos, seguimos comprometidos con informarte.
SUSCRIBITE PARA QUE PODAMOS SEGUIR INFORMANDO.
Haulover, huracán iota,

El huracán Iota arrasó con la comunidad Haulover, en Bilwi, Costa Caribe Norte de Nicaragua, no dejando nada quedo en pie. LA PRENSA/CORTESÍA/UNICEF

Después de una temporada activa ciclónica y emergencia climática. ¿Qué se espera en Nicaragua para el 2021?

Especialistas en cambio climático indicaron que el panorama podría ser similar o un poco menor que el 2020, acompañado de los efectos de la crisis climática sobre la región centroamericana

A pesar de que los pronósticos sobre la temporada ciclónica en el Atlántico para 2020 eran la formación solamente de 19 tormentas, este año cerró batiendo récord. Un total de 30 tormentas con nombres propios se formaron, dos de ellas Eta e Iota —en máxima categoría según la escala Saffir Simpson— afectaron directamente a Nicaragua, tras su impacto en el Caribe Norte y en otros países de Centroamérica.

Es difícil predecir cómo será o qué se podría esperar del 2021. El oficial de Cambio Climático del Centro Humboldt, Mario Montoya, explicó a LA PRENSA que cada año tiene un comportamiento diferente, que depende del fenómeno del Niño o la Niña existente para determinar la temporada ciclónica y que a la vez incide la emergencia climática que se vive en el mundo.

Puede interesarle: Que el cambio climático no nos distraiga 

En ese sentido, dijo —en alusión a lo que se vivió en el 2020— que fue un año en que se “sobrepasó las expectativas de todos los centros de vigilancia, e incluso el Centro Nacional de Huracanes (NCH por sus siglas en inglés). Los dos huracanes en noviembre con su comportamiento atípico nos sorprendió. Podríamos decir que el año que viene tendríamos un comportamiento similar o menor, por los efectos de la crisis climática sobre la región centroamericana que se agudiza”, apuntó.

En esa línea, el agrometeorólogo del Centro Humboldt, Agustín Moreira, mencionó que la crisis climática genera perspectivas en relación a cómo debemos de irnos adecuando ante los pronósticos, que pueden reflejarse en mayores sequías o fuertes intensidades de lluvias. “La situación variante de la crisis climática está determinando los eventos que podrían ser extremadamente fuertes, como lluvias y temporadas ciclónicas, o encontrarse con la parte inversa, como fuertes sequías, que serán mayores de las que hemos tenido en los últimos 20 años”, atinó.

Por su parte, Alejandro Alemán, especialista en negociaciones de cambio climático del Centro Humboldt, indicó que lo que se vivió en el 2020 con la activa temporada ciclónica es “la punta del iceberg. Lo que la ciencia nos dice sobre lo que pudiera ocurrir si no se toman las medidas necesarias (…) en términos ambientales y climáticos, para los países como el nuestro va a ir de mal en peor, si se siguen tomando acciones en contra del medioambiente”.

2021 Nicaragua: “Combinación del Niño neutral y la Niña”

En referencia a lo que se espera en 2021 para Nicaragua, Moreira indicó que por ahora se maneja solamente lo de la combinación del Niño neutral y la Niña. “Por el momento tenemos lo del fenómeno del Niño neutral, contra la Niña, que se van a estar generando durante el primer trimestre del año 2021. El Niño seco se mantendrá un poco bajo en relación a cómo podríamos estar inclusive con el ingreso de la temporada lluviosa en Centroamérica, de mayo a septiembre. Lo que podemos tener es el  Niño neutral, combinado con la Niña, pero que aún su comportamiento es incierto”, describió.

Alemán determinó que si para el próximo año se mantiene dicha combinación de fenómenos, lo que se espera es que “la temporada ciclónica sea menos activa, pero con bastantes lluvias. Porque en 2020 lo que se mantuvo fue el fenómeno de la Niña muy pronunciado y por eso vimos los impactos más agudos”.

Lea además: Agustín Moreira: «La crisis climática está cada vez más fuerte y difícil de predecir»

Por su parte, Montoya agregó que a pesar de que el fenómeno incide en forma de parábola, primero el fenómeno del Niño, después la Niña y de ahí baja a neutral —como el ciclo del comportamiento— “no quitamos el dedo del reglón y siempre estamos en constante vigilancia por los cambios”.

Revertir comportamiento o se agudiza la crisis climática 

Los especialistas coincidieron en recalcar aspectos importantes en el marco de la “emergencia climática” que a nivel mundial fue declarada el 12 de diciembre por la Organización de Naciones Unidas (ONU), a solicitud de su secretario general Antonio Guterres. El funcionario regional  instó a las naciones a declararla, con el fin de que alcanzar la meta de cero neto en las emisiones de gases de efecto invernadero.

El oficial de cambio climático dijo que la crisis “determina las condiciones y las mayores repercusiones que se pueden dar, por ejemplo en mayores días de lluvias y otros abundantes —más de 1oo milímetros en 24 horas— son las secuelas que estamos viviendo actualmente, que afectan directamente las unidades productivas sean agrícolas y agropecuarias”.

Lea también: 2020, uno de los «peores años» en condiciones climáticas para Nicaragua

Por su lado, el agrometeorólogo especificó que la solicitud apunta que Nicaragua debe asumir con compromiso la emergencia climática. “Si Nicaragua no asume la emergencia climática, tendríamos que pagar consecuencias muy graves como país del tercer mundo, que de por sí ya nos estamos encontrando próximamente en una crisis ambiental donde tenemos escasez  del agua, dificultades para la sobrevivencia de la agricultura, ganadería y del mismo ser humano”, detalló.

Iota terminó de destruir el muelle de Bilwi que ya había sido afectado por el huracán Eta. LA PRENSA/Julio Estrada Galo

Enseguida, Alemán enfatizó en que para las próximas décadas, si no se revierte el daño ocasionado al medioambiente, lo que se espera es “la profundización de la misma crisis climática, que lleva consigo varios factores, en términos de recursos hídricos, el agua se está identificando como un bien escaso, patrones irregulares de precipitación, sequías extremas, lluvias extremas que no benefician la agricultura sino que generan desastres”.

Ante este panorama, los especialistas llamaron al Gobierno de Nicaragua a tomar iniciativas para revertir el comportamiento como “enemigos del medioambiente (…) Debemos de asumir responsabilidades, compromisos ante la ONU ante al emergencia climática mundial que se está solicitando”.

Puede interesarte

×

El contenido de LA PRENSA es el resultado de mucho esfuerzo. Te invitamos a compartirlo y así contribuís a mantener vivo el periodismo independiente en Nicaragua.

Comparte nuestro enlace:

Si aún no sos suscriptor, te invitamos a suscribirte aquí