El nicaragüense Jorge Addison Martínez Martínez, de 19 años de edad, oriundo de Boaco, pereció en un hospital de Maryland, Estados Unidos, el 18 de agosto pasado, luego de ser atropellado cuatro días antes —el 14 de agosto— por un vehículo en una avenida en Riverdale, cuando regresaba a su casa en College Park, Maryland, Estados Unidos.
El joven, explicó su padre Jorge Antonio Martínez en entrevista con LA PRENSA, fue atropellado el pasado 14 de agosto a eso de las 9:10 de la noche, según el reporte policial, cuando volvía de visitar a un amigo que habita en New Carrollton. El progenitor urgió a las autoridades estadounidenses que amplíen las investigaciones relacionadas al accidente, ya que de forma preliminar le han indicado que solo por la declaración de un supuesto testigo del accidente, posiblemente la responsabilidad habría sido de su hijo.
“No es posible que solo porque un testigo diga que vio lo que pasó quieran dar por cerrado el caso, porque eso es lo que dice el reporte, que ya casi un mes y el reporte nunca estuvo completo. Nosotros queremos saber qué pasa con las cámaras de video de ese semáforo donde ocurrió el accidente. Hay negocios con cámara en la zona del accidente ¿qué pasa con eso? ¿por qué no revisan eso?”, cuestionó el progenitor del joven.
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“Nosotros necesitamos saber todo, porque si hay un responsable tiene que ir a la cárcel. Tiene que haber justicia para mi hijo”, resaltó.
Además, aclaró que como familia “no estamos tomando ninguna represalia personal contra la persona que atropelló a mi hijo, solo necesitamos que se haga justicia, que se aclaren los hechos, no importa si fue imprudencia de mi hijo, pero queremos saber, que nos aclaren lo que pasó”.
Cinco días sin saber el paradero de su hijo
El padre señaló que supieron del accidente que sufrió Jorge Addison Martínez Martínez hasta cinco días después que ocurrió, pese a que ya lo habían buscado y reportado como desaparecido luego que este no respondía sus llamadas.
“A nosotros nos avisaron hasta el lunes 19 de agosto a las 5 de la tarde. Nos dijeron que mi hijo estaba hospitalizado (…) Pero, cuando llegamos lo encontramos entubado, lo mirábamos respirando, pero estaba muerto cerebralmente. Luego, nos llevaron a una sala privada y nos dijeron que lamentablemente mi hijo había fallecido cerebralmente el domingo 18 de agosto. Lo tenían conectado solo para que llegaran los familiares a despedirse”, detalló.
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Jorge Addison Martínez Martínez en el accidente sufrió una fractura en su pierna izquierda y en varias costillas, sus pulmones y parte del hígado “quedaron desbaratados”, tenía parte de su clavícula fracturada y fue sometido a un sinnúmero de operaciones que no fueron suficientes para que lograra sobrevivir.
El joven tenía tres meses de haber recibido la bicicleta eléctrica en la que iba a bordo cuando fue atropellado. Su padre se la dio como un regalo para que se “ahorrara un poco” de los ingresos que destinaba para taxi cuando se trasladaba a su centro de trabajo en uno de los restaurantes de la cadena McDonalds en Maryland.
Sepultura será en Mulukukú
El próximo 30 de septiembre, Jorge Addison Martínez Martínez habría cumplido seis años de vivir en territorio estadounidense. El padre del joven explicó a LA PRENSA que migró junto a él y otra hija en busca de mejores oportunidades.
Además, describió a su hijo como un muchacho trabajador, que le gustaba tocar la guitarra, escribir canciones e ir a la iglesia evangélica.
“El 14 de agosto a las 4:10 de la tarde fue la última llamada que tuvimos. Le dije que teníamos una cita para exámenes médicos, que no me fallara. Me dijo que estaba bien, que no me iba a fallar. La cita era el 27 de agosto. Hablamos 2 minuto 25 segundos. Esa fue nuestra última llamada”, recordó el progenitor.
Además, indicó que como familia siguen recogiendo fondos para lograr repatriar el cuerpo de Jorge a Mulukukú, en el Caribe Norte de Nicaragua, donde el joven vivió toda su niñez y parte de su adolescencia con él y su abuela paterna.
Las personas que deseen apoyar la repatriación del cuerpo de Jorge Addison Martínez Martínez pueden contactarse con la organización AbueNica, al número +1 (703) 649-8009, organización que apoya a la familia con las gestiones de repatriación.
