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Las buenas noticias sobre monseñor Rolando Álvarez

Después de varios meses sin que se pudiera conocer la situación de monseñor Rolando Álvarez, el desterrado obispo de Matagalpa y administrador apostólico de la Diócesis de Estelí, LA PRENSA publicó este miércoles 22 de mayo la declaración del obispo hondureño José Antonio Canales, de que se reunieron en el Vaticano.

“Él está muy animado, lleno de esperanza y optimismo”, dijo monseñor Canales, quien es el obispo de Danlí, Honduras, y ha estado muy pendiente de la situación de los obispos y sacerdotes nicaragüenses que han sido víctimas de la represión del régimen de Nicaragua contra la Iglesia católica, en particular de monseñor Rolando Álvarez.

El prelado hondureño aclaró el  porqué del silencio de monseñor Álvarez, desde que fue excarcelado el 14 de enero pasado, después de permanecer en prisión durante más de año y  medio, y desterrado al Vaticano donde ahora se encuentra exiliado.

Por la falta de información de la Iglesia católica de Nicaragua, y la declaración del régimen de que la liberación de monseñor Álvarez junto con otros 18 religiosos fue resultado de una negociación con el Vaticano, se especulaba que el silencio de monseñor Álvarez podía deberse a una orden del papa Francisco, para facilitar el diálogo.

Sin embargo, el obispo de Danlí aclaró que es una decisión personal “para reflexionar (…) Está pasando por un período de silencio personal, nadie se lo ha impuesto. Es una decisión personal de él para tener tiempo para sí mismo, para reflexionar sobre su vida, pero todo está bien”, informó el obispo hondureño. Y agregó que monseñor Álvarez sigue siendo obispo de Matagalpa y administrador de la Diócesis de Estelí.

Sobre la situación de la Iglesia de Nicaragua, aunque él no puede hablar en nombre del Vaticano, el obispo hondureño explicó a LA PRENSA y por este medio a todos los católicos nicaragüenses, que “la Santa Sede quiere llevar las cosas con tranquilidad, viendo qué signos aparecen en el horizonte de la situación”.

Los católicos saben que la Iglesia actúa siempre con paciencia, que nunca se precipita. Para la Iglesia católica “la prudencia es la causa, la raíz, la madre, la medida y el ejemplo, la guía y la razón precisa de todas las demás virtudes”. Por eso ha salido airosa de todas las pruebas a las que ha sido sometida a lo largo de su historia de más de dos mil años. Por eso ha podido vencer a sus enemigos, inclusive aquellos que  parecieran todopoderosos e invencibles. 

Ahora bien, estamos seguros de que a los católicos nicaragüenses les conforta saber que monseñor Rolando Álvarez se encuentra bien, después de tanto martirio. Y pueden entender su mutismo temporal.

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