Cada joven que se firma para el beisbol profesional constituye una esperanza de un posible nicaragüense hacia el beisbol de Grandes Ligas, hasta que la realidad demuestre lo contrario. Y aunque hay ocasiones en las cuales la realidad sorprende y va más allá de lo que podríamos haber imaginado, por lo general son más las frustraciones que las alegrías.
Ahora mismo somos testigos del esfuerzo titánico de Ismael Munguía, el patrullero que está dando la batalla por insertarse en los Gigantes de San Francisco. De igual modo, se observa el desarrollo creciente de Carlos Rodríguez, tirador que lucha por un puesto en la rotación de abridores de los Cerveceros de Milwaukee. Ambos están dando pelea.
De la misma forma se aprecia la desaceleración en el ritmo de Freddy Zamora, el infielder nica que hasta hace dos años era el pinolero mejor valorado por los especialistas entre los que están en las Ligas Menores. No obstante, lesiones e inconsistencias han frenado el progreso del “Sheriff Jr.” y este año tiene que decir la verdad sobre su futuro.
Pero, ¿qué hay detrás de estos tres prospectos a menudo mencionados? Hay esperanzas, que a veces se tornan en desilusiones, pero mientras la realidad no los juzgue con severidad, serán portadores de ese sueño, de ese deseo de otro nica en camino hacia las Grandes Ligas. Demos un rápido vistazo a los principales prospectos detrás de estos tres.
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Stiven Cruz podría ser el más adelantado. El chavalo de Nagarote que enseñó los dientes en la Liga Profesional con el Tren del Norte y la Selección Nacional en el Premundial U23, va a comenzar en AA (Wisconsin) con Milwaukee y va hacia una etapa en la que podría saltar al futuro o quemarse. Tuvo un mal 2023 (7-6 y 6.90), pero ha lucido bien ahora.
De hecho, Cruz, un derecho espigado de llamativa velocidad y buenos disparos rompientes viaja este viernes a Arizona para terminar de ponerse en forma para la próxima temporada. Lo hará acompañado de otro notable prospecto de Milwaukee como Alexander Vallecillo, quien va someterse a observaciones médicas tras sentir molestias en la espalda.
Vallecillo de 21 años y nativo de Esquipulas, Managua, es también otra posibilidad real hacia las Ligas Mayores. Pero por ahora, su prioridad es su salud. Una vez saludable, habrá que seguir sus huellas. De igual modo no hay que perder de vista a Rodney Teophile, el espigado derecho de los Nacionales que podría ir a un año decisivo en su carrera.
Detrás está Fernando Pérez, de los Azulejos, quien tuvo un rápido paso por Dominicana y este año debe moverse a Clase A. Se mostró fuerte y controlado y se espera que continúe creciendo. El año pasado tuvo 2-2 y 2.72 con 57 ponches en 49 innings en la Liga de Novatos (FCL). Así que un paso a Clase A media sería un avance muy valioso.
Luego hay una buena cantidad de jóvenes que saltarán de Dominicana a Estados Unidos y entre ellos destacan los de Milwaukee, Bryan Rivera, cuya recta alcanza hasta las 96 milla; Enniel Cortez, quien tiene un repertorio amplio y sabe cómo usarlo; Joshua Quezada, quien fue extraído de los Yanquis y Melvin Hernández, quien ha resultado muy hábil.
Después hay otro grupo de muchachos que tienen gran potencial, pero también ajustes que deben hacer y regresan a Dominicana: Lloyd Downs (Royals), Kendal Meza (Seattle), Joshawn Lampson (Yanquis), Duque Hebbert (Detroit), Ranwell Smith (Milwaukee) y Abraham Gaitán (Rojos) entre otros, más las incorporaciones de este año.