El pasado jueves 7 de diciembre, los nicaragüenses reafirmamos una vez más como se viene haciendo hace más de un siglo, que la Virgen María es nuestra Madre y que los nicaragüenses somos sus hijos. Digo esto porque días antes de la celebración de la Gritería, me comuniqué con varios amigos que viven en diferentes ciudades y les pedí que me hicieran un relato corto de cómo se celebró la Gritería en sus ciudades. Agradezco el que se hayan tomado el tiempo para escribirme con sus vivencias y las fotos.
El año pasado para esta misma fecha escribí afirmando que el 7 de diciembre, cuando los nicaragüenses rendimos homenaje a la Madre de Dios, es la celebración por mucho, más popular y multitudinaria de los nicaragüenses. Este año se volvió a confirmar mi aseveración, pues todos los reportes de mis amigos me confirman que la pólvora y la gente que se lanzó a las calles fue impresionante. La ciudad de León, como siempre se lució con su tradicional grito que una vez más llenó el atrio de Catedral de feligreses respondiendo al ¿Quién causa tanta alegría?, con el consabido ?¡La concepción de María!
Otras ciudades como Granada, Chinandega, Estelí Rivas, Matagalpa y sus respectivos municipios, no se quedaron atrás. Sin temor a equivocarme puedo decir que la gran mayoría del pueblo nicaragüenses se lanzó a las calles una vez más celebrando a María de Nicaragua. Los nicaragüenses que se encuentran fuera de la patria también la celebraron. Mi amigo Sergio Martínez me envió un corto video de una imagen de la Virgen en su altar bellísimo, lo compartí con mis amigos y en menos de dos horas había alcanzado más de dos mil vistas.
En Miami en una iglesia en que se congregan los domingos los católicos nicaragüenses, la celebraron a lo grande con la animación del joven Iván Salazar Medina y su Marimba Nica. El video que postearon en las redes sociales era impresionante con una iglesia llena tanto dentro como fuera, todos cantándole y rindiéndole homenaje a la Virgen María. En San Francisco, California, Los Ángeles y Wisconsin no se quedaron atrás y también rindieron tributo a nuestra patrona y protectora.
El Diario LA PRENSA reportó la forma en que se había dado la Lavada de la Plata y una vez más el fervor mariano se hizo presente con miles de devotos de la Virgen lavando con algodones la platería. En pocas palabras los nicaragüenses podremos tener diferencias en muchas cosas, pero en lo que respecta a conmemorar y alabar a la madre de Dios que adoptamos como madre nuestra hace más de un siglo, allí desaparecen las diferencias a como lo vivimos una vez más el pasado 7 de diciembre. Que sean los sociólogos, comunicólogos o los microfoneros los que traten de encontrar el significado que ellos quieran darle a semejante celebración, que como dije antes la más masiva expresión popular en Nicaragua y que esta se da entre los que profesamos la religión católica y que reconocemos en la Conchita, como se le dice popularmente a nuestra patrona.
Para finalizar solo me queda afirmar que tanto nuestra Iglesia como la Santa Patrona de los nicaragüenses, seguirán arraigados en el sentimiento de nuestro pueblo por muchos siglos más y que la fe al igual que las tradiciones son expresiones de sentimientos que se llevan en la sangre.
Felicito a ese pueblo que salió una vez más con fervor y alegría y que con su masiva participación hicieron que retumbara hasta en el último rincón de Nicaragua el grito de ¿Quién causa tanta alegría?, a lo que respondían: ¡La concepción de María!
El autor es analista político y social y directivo nacional de las Fuerzas de Veteranos de Guerra de la Resistencia nicaragüense.