La dictadura de Daniel Ortega y Rosario Murillo, en los últimos años, ha dado un giro de 180 grados en la política migratoria que aplica en Nicaragua. Entre 2015 y 2017, previo a la crisis sociopolítica de 2018, el orteguismo cerró el paso de migrantes haitianos y africanos, manteniéndolos varados durante meses en la frontera Sur y, actualmente les permite el ingreso masivo para que sigan su travesía hacia Estados Unidos.
LA PRENSA comprobó que la llegada de extranjeros de origen haitiano y africano en el país es masiva. En el Aeropuerto Internacional Augusto C. Sandino diariamente ingresan entre 10 y 20 vuelos procedentes de Puerto Príncipe, Haití; Providenciales; La Habana, Cuba y República Dominicana.
También llegan cientos a través de las conexión de la línea aérea Avianca desde El Salvador. En el aeropuerto de ese país son notorias las filas de migrantes africanos para los vuelos hacia Managua, los cuales ahora llegan llenos.
El 21 de octubre, según la lista de vuelos programados, divulgada por la Empresa Administradora de Aeropuertos Internacionales (EAAI), estaban programados para ingresar 15 vuelos desde Puerto Príncipe, Haití; 3 de República Dominicana; 2 de La Habana, Cuba; y 2 de la isla Providenciales.
Las aeronaves en las que llegan estos extranjeros, según la revisión de LA PRENSA de la capacidad de los aviones que arriban al país, trasladan en cada unidad entre 50 y 220 personas. Por lo que según esos datos, por día están ingresando entre 1,000 y 5,000 extranjeros procedentes de esas ciudades.
Migrantes tienen mapeada la ruta hacia EE. UU.
LA PRENSA comprobó, en un reporte divulgado recientemente, que los migrantes haitianos y africanos que llegan al país incluso ya tienen mapeadas las rutas y servicios que pueden conseguir para seguir su travesía hacia Estados Unidos.
Algunos migrantes pagan 50 dólares por persona para llegar a la frontera Norte de Nicaragua y de esa forma cruzar de forma irregular hacia Honduras. Otros, con menos presupuesto, optan por hacer el viaje en buses intermunicipales, que los llevan hasta municipios aledaños a la frontera.
Este diario recientemente realizó una visita al Aeropuerto Augusto C. Sandino y constató que las instalaciones se encuentran abarrotadas de extranjeros haitianos y del continente africano. Algunos de los migrantes, que aparentemente no costearon la habitación de un hotel en la capital, incluso duermen en el piso de aeropuerto junto con sus hijos menores de edad.
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Otros optan por esperar sentados en la zona del parqueo del Aeropuerto o bien se acercan a transportistas para intentar contratar el servicio de traslado hacia la frontera Norte.
Algunos comerciantes del Aeropuerto comentaron a LA PRENSA que estos extranjeros consumen poco y muchos buscan cómo encontrar a personas con las que previamente hicieron contactos.
“No se les entiende casi nada, si compran algo le ponemos el número y así saben cuánto pagar en dólares. Otra cosa que siempre hacen es preguntar con foto, te enseñan foto de la persona que buscan, y muchos se quedan a domir en el aeropuerto para hacer tiempo y salen en las mañanas”, indicó una de las trabajadoras de una tienda de alimentos ubicada en el Aeropuerto.
Denuncian “negocio” de la dictadura
Un grupo de organizaciones opositoras, en un comunicado conjunto, denunció que la ausencia de la dictadura orteguista en la cumbre regional sobre Migración, convocada por el presidente de México, Manuel López Obrador, ocurre porque los dictadores Daniel Ortega y Rosario Murillo, en complicidad con las instituciones del Estado de Nicaragua, se lucran de la migración masiva de personas que buscan llegar a Estados Unidos.
“Ortega ha facilitado y se encuentra haciendo negocio con miles de cubanos y otros migrantes extracontinentales que llegan a Nicaragua para dirigirse al norte”, señalaron los opositores.
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Además, resaltaron que justamente por ese motivo es que los dictadores nicaragüenses no figuran entre los invitados de la cumbre regional sobre Migración, que se realizará el próximo 22 de octubre, en Palenque, México, con la participación de jefes de Estado de Belice, Colombia, Cuba, Costa Rica, Ecuador, El Salvador, Guatemala, Haití, Honduras y Panamá.