La Alcaldía de Managua registró en la primera mitad de este año un incremento de más del 10 por ciento en los ingresos por impuestos, según datos publicados por el Ministerio de Hacienda y Crédito Público. El reporte muestra que la comuna también recibió transferencias del Gobierno Central. Este apoyo le permitió cerrar el semestre con un ingreso total de 3,941 millones de córdobas.
Entre enero y junio de este año, la Alcaldía —controlada por el orteguismo— reportó en recaudación de impuestos 3,216.6 millones de córdobas, superior a los 2,722.0 millones en igual periodo del año pasado. El monto reportado este año supera con creces los niveles antes del 2017 y muestra un crecimiento sostenido, aún con la crisis del 2018.
En el 2018, luego de tres meses de crisis política, que provocó la paralización casi completa de Managua entre abril y junio de ese año, los ingresos fiscales de la Alcaldía sumaron en junio 1,939.4 millones de córdobas, es decir que hasta la fecha se ha casi duplicado la recaudación.
Reflejo de la persecución fiscal
“Lo que observamos en esos números es que la política de persecución fiscal de la Alcaldía de Managua contra, especialmente, las empresas, le ha dado resultado, al punto que durante los años de recesión entre el 2018 y el 2020 sus ingresos semestrales siguieron creciendo. Y esa persecución incluye aumento en los costos de matrículas para los negocios y el pago del Impuesto sobre Bienes Inmuebles, que en su momento denunciaron también las iglesias y parroquias”, afirmó un economista, quien pidió no ser citado por temor a represalias.
En la primera mitad del 2019 la recaudación de la Alcaldía de Managua ascendió a 1,962.9 millones de córdobas; en igual periodo del año siguiente sumó 2,323.7 millones; y a junio del 2021 totalizó 2,451.1 millones.
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Persecución alcanzó a las iglesias
En julio pasado, líderes religiosos denunciaron que el régimen había ordenado el cobro de IBI a las iglesias católicas y evangélicas, pese a que el decreto ejecutivo número 3-95, aprobado el 31 de enero de 1995, incorpora a las instituciones religiosas dentro del grupo de exentos de este gravamen.
Las notificaciones de cobros de este impuesto las repartieron entre varias iglesias evangélicas y católicas en la primera mitad de este año, pero hasta este mes fue cuando algunos religiosos se atrevieron a denunciar la ilegalidad bajo condición de anonimato, pero presentando las notificaciones municipales.
Este impuesto grava las propiedades inmuebles ubicadas en la circunscripción territorial de cada municipio de la República y poseídas al 31 de diciembre de cada año gravable. Se aplica sobre el valor actualizado de los terrenos, las plantaciones estables o permanentes, y las instalaciones o construcciones fijas y permanentes que en ellos existan, así como otros bienes.
LA PRENSA conoció que también a los tramos de los mercados de Managua les están cobrando más impuestos municipales y matrículas. Sin embargo, los comerciantes guardan silencio porque temen que los despojen de sus locales o espacios comerciales.
Paralelo a la recaudación de impuestos, la Alcaldía reporta una transferencia de 505.5 millones de córdobas en sus ingresos, que provendrían de los recursos del Presupuesto General de la República. A estos se sumaron otros 218.9 millones.
Según el informe de ejecución presupuestaria, para este año está programado que la Alcaldía de Managua reciba en transferencia municipal para gasto de capital 660.50 millones de córdobas, uno de los montos más grandes de los 153 municipios.
Alcaldías operan con las uñas
El fuerte aumento de los ingresos de la Alcaldía de Managua le ha permitido operar con un abultado colchón financiero y muestra de ello es que después de los gastos operativos (que hasta junio sumaron 800.5 millones de córdobas), este terminó con un superávit de 3,140.5 millones de córdobas.
Entre sus gastos se encuentra la planilla, que hasta junio implicó un gasto por 394.3 millones de córdobas; también se gastaron 378.6 millones en bienes y servicios; y 22.2 millones en prestaciones sociales, entre otros.
“Lo que vemos acá es que mientras las alcaldías de las zonas rurales operan con las uñas, con transferencias gubernamentales reducidas y que por muchos años fueron castigadas por la dictadura si estas pertenecían a opositores, vemos a una Alcaldía de Managua operando muy solvente, sin problemas financieros”, explicó el especialista.
A criterio del economista, no se puede atribuir el aumento de la recaudación de impuestos de la comuna capitalina a un crecimiento económico fuerte o a la creación de nuevos negocios en Managua o la llegada de empresas, porque los números oficiales no reflejan esa realidad. “Vos andás por Managua y lejos de nuevos negocios, lo que te encontrás es a gente que está vendiendo sus casas y negocios para irse a Estados Unidos con el parole”, ejemplifica.
Según datos del Banco Central de Nicaragua, el crecimiento del Producto Interno Bruto en el primer semestre del año se ubicó en 3.8 por ciento y el crecimiento promedio anual en 3.3 por ciento, de acuerdo con la estimación preliminar en la serie de datos originales.
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Abultado superávit
Hasta junio de este año, la Alcaldía de Managua reportó en la adquisición de activos no financieros un monto de 2,032 millones de córdobas. Esto sumado a los gastos operativos da como resultado una erogación total por 2,832.5 millones de córdobas.
Aún con la erogación total, la comuna obtuvo en superávit 1,108.5 millones de córdobas en el primer semestre, un monto que supera con creces los 295.8 millones de córdobas reportados en todo el 2022, según cifras de Hacienda.
Incluso el superávit global de la comuna es mayor que los 265.6 millones de córdobas en el 2018; los 258.7 millones en todo el 2019; los 441.2 millones en el 2020; y los 564.3 millones en el 2021. “Estamos viendo una Alcaldía que está muy solvente, que tiene muchos recursos para gastar, mientras las otras, donde sale la producción, operan muy limitadas”, enfatiza el economista.