Familiares de presos políticos lamentaron la forma “abrupta” y “dolorosa” con que fue expulsado de Nicaragua el nuncio apostólico Waldemar Stanislaw Sommertag, quien salió del país el pasado 6 de marzo a solicitud del régimen de Daniel Ortega.
«Aseguramos al santo padre (papa Francisco) que esta decisión unilateral no expresa nuestro sentir como personas devotas y respetuosas», señala el comunicado firmado en conjunto por los familiares de los presos políticos que se encuentran en el nuevo Chipote desde mayo de 2021, la Organización de Víctimas de Abril (OVA) y el Comité Pro Liberación de Presas y Presos Políticos de Nicaragua.
En el documento los parientes de reos de conciencia reconocieron la labor humanitaria que desempeñó el nuncio apostólico durante su permanencia en Nicaragua, y destacaron particularmente su gestión “en favor del respeto y la liberación de las personas presas políticas hasta el día de hoy”.
«A su excelencia, le pedimos con sencillez poder seguir contando con sus oraciones y apoyo, desde donde se encuentre, para velar por los derechos humanos y la dignidad de los nicaragüenses. Deseamos de corazón que cualquiera que sea su nuevo oficio le colme de satisfacción, paz y bendiciones», describieron los familiares de presos políticos.
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El representante del Vaticano llegó a Managua en mayo de 2018, cuando el país estaba sumergido en unas convulsas manifestaciones antigubernamentales, en las cuales la Iglesia católica fungió como mediadora entre el Ejecutivo y la oposición para buscar una salida pacífica a la crisis.
La salida del país del nuncio se dio el pasado 6 de marzo, cuando la Nunciatura anunció en un comunicado que el representante del papa «se ausentó» del país, quedando al frente el secretario de la Nunciatura, monseñor Marcel Mbaye, a nivel de encargado de negocios.
Oración por “el grito sufriente” del pueblo
En el comunicado, los parientes de reos políticos pidieron al papa Francisco que eleve sus oraciones “por el grito sufriente de nuestro pueblo y nos conceda su continuo acompañamiento”.
“Esperamos con ansias, esperanza e inquebrantable fe el día de resurrección: deseamos, con la ayuda de Dios, abrazar en libertad a nuestros familiares injustamente encarcelados y ver un mañana de paz y justicia en Nicaragua y en el mundo”, finalizaron.
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De acuerdo con el último informe del Mecanismo para el Reconocimiento de Personas Presas Políticas, actualmente Nicaragua tiene al menos 179 opositores encarcelados en los diferentes sistemas penitenciarios y cárceles del país.
Aunque el 2021 fue uno de los años más funestos para los opositores, marcado por el secuestro de aspirantes a la Presidencia, empresarios, activistas, campesinos, estudiantes, abogados, diplomáticos y periodistas, lo cierto es que desde el 2018 el régimen no ha parado la cacería contra quienes se le oponen.