14
días
han pasado desde el robo de nuestras instalaciones. No nos rendimos, seguimos comprometidos con informarte.
SUSCRIBITE PARA QUE PODAMOS SEGUIR INFORMANDO.

Imagen referencial. Archivo/LA PRENSA

Canasta básica nicaragüense experimenta nueva alza en agosto y supera los 15,200 córdobas

De los tres segmentos que conforman la canasta básica, el grupo de los 23 alimentos fue el que más experimentó encarecimiento en sus precios.

Agosto se convierte en el quinto mes del año en que la canasta básica rebasa los 15,000 córdobas y el segundo en presentar el monto más alto, luego de junio. Específicamente, el costo de la cesta familiar se ubicó en 15,270.59 córdobas, un 5.7 por ciento más que lo registrado en el mismo mes del año pasado (14,445.52 córdobas), según cifras del Instituto Nacional de Información de Desarrollo (Inide).

Asimismo, si se compara con el costo que tenía dicha canasta en julio, cuando llegó a contabilizarse en 15,226.04 córdobas, para agosto se refleja un aumento del 0.29 por ciento, es decir, una diferencia monetaria de 44.55 córdobas.

La tendencia alcista en el costo de la canasta básica afecta directamente a las familias nicaragüenses, que desde el estallido de la crisis sociopolítica de abril de 2018 y la pandemia de covid-19 en 2020, han experimentado un deterioro de su poder adquisitivo. Además, paralelo a ello los combustibles se han encarecido y los salarios no alcanzan para comprar los productos y servicios que conforman dicha canasta.

Lea también: Canasta básica cede en abril apenas 98 córdobas, pero acumula 400 córdobas de alza en 2021

De hecho, la canasta en diciembre del año pasado se cotizaba en 14,526.34 córdobas, lo que representa un incremento de 5.1 por ciento hasta agosto de 2021. La diferencia monetaria es de 319.18 córdobas, aunque especialistas han advertido, en declaraciones a LA PRENSA, que el valor de esta puede ser mayor a lo que reflejan las cifras oficiales.

Las cifras oficiales indican que de los tres segmentos que conforman la canasta básica (alimento, vestuario y usos del hogar), el grupo de los 23 alimentos fue el que más experimentó encarecimiento en sus precios, los cuales representan el 67 por ciento del total de la cesta.

En concreto, en diciembre de 2020 el valor de estos productos totalizó 9,681.56 córdobas y en agosto de este año, la cifra ascendió a 10,237.15 córdobas, lo que significó un incremento del 5.7 por ciento y una diferencia monetaria de 555.59 córdobas.

En esta sección se encuentran los alimentos básicos, carnes, lácteos, huevos, cereales y perecederos. De estos segmentos, los que más bajaron su precio en agosto fueron los frijoles, queso, tomate, papa, ayote, chiltoma, plátano verde y repollo.

Mientras, se incrementó el precio del arroz, azúcar, aceite, posta de res, posta de cerdo, chuleta de pescado, leche, huevos, tortilla, pan, cebolla y naranja.

En el periodo antes mencionado, usos del hogar, que representa el 21.2 por ciento del total de la canasta, contabilizaba 3,102.26 córdobas y ahora esta cifra se ubica en 3,249.75 córdobas, es decir, hubo un incremento equivalente al 4.7 por ciento. Siendo el jabón de lavar ropa, el papel higiénico y el gas butano los productos que más aumentaron su precio en agosto.

En el caso de vestuario, en diciembre de 2020 se requerían 1,742.52 córdobas para solventar estos gastos. Ahora el costo se posiciona en 1,783.69 córdobas. Lo que se traduce como un crecimiento del 2.3 por ciento.

Factores que influyen en precio de cesta familiar

El sociólogo Cirilo Otero explicó a LA PRENSA que esta situación se deriva de varios factores, siendo el primero que no hay suficiente producción para el consumo alimentario de los nicaragüenses. “Por ejemplo, somos importadores de tomates, lechuga, repollo, cebollas, arroz, entre otras cosas. Lo que pareciera ser que producimos bastante son frijoles y maíz”, mencionó.

Le puede interesar: Canasta básica asciende a 14,957.11 córdobas en mayo. Gobierno dice que en ese mes solo subió 17 córdobas

A criterio del especialista, el segundo factor sería el actual costo de los insumos agrícolas, los cuales han encarecido como consecuencia de la reforma a la Ley de Concertación Tributaria, aprobada en 2019, la cual por primera vez en 60 años gravó con impuestos los insumos del sector agropecuario. “Todo ha subido exponencialmente, eso encarece el proceso productivo y el producto como tal”, agregó Otero.

“El tercer factor es que a pesar de que aquí se dice que hay políticas públicas encaminadas a proteger los bienes alimentarios, no es cierto. Estos también están gravados y lo están en el origen, no precisamente en el impuesto sobre venta. Eso quiere decir que están gravados de manera oculta e incide en el precio”, compartió.

Asimismo, aseguró que otro motivo es que en Nicaragua hay poca información sobre la diversificación y combinación alimentaria. “Estamos acostumbrados, por cultura alimentaria, que debes de llevar un pedazo de carne, arroz y frijoles, eso es una pésima educación, información que tenemos los nicaragüenses. Porque si ya estás comiendo arroz o frijoles, o ambos, estás comiendo carbohidratos fundamentalmente, pero no tenemos una buena cultura. Por ejemplo, comemos hasta tres veces en el día carne o si estamos en crisis, no la comemos del todo, somos extremistas”, expresó.

Siguiendo esta línea, agregó que otro punto es que a pesar de que existe una ley de soberanía y seguridad alimentaria nutricional, la misma es ineficiente, ineficaz y no se aplica. “No hay consejo ciudadano que pueda sugerir cambios, no hay consejo gubernamental que tenga que ver con seguridad alimentaria nutricional, no hay nada. La ley está totalmente muerta”, enfatizó.

Lea además: Canasta básica experimenta una nueva alza en junio y supera los 15,300 córdobas

Por otro lado, considera que esta situación también es consecuencia del continuo aumento en el valor de los combustibles, lo que tiene influencia en el resto de precios de la economía nacional, incluida la canasta básica y, principalmente, en los productos de la sección de alimentos.

“Como Nicaragua es un país dependiente de los hidrocarburos, cuando sube el precio del combustible, todo sube. Es una espiral, porque eso tiene que ver con el transporte, energía eléctrica, la comercialización, el almacenamiento, etcétera. Hay como un concepto casi automático, suben los precios de los bienes alimentarios, con el solo hecho de que se mueva, aunque sea brevemente, el precio del petróleo”, indicó.

De hecho, datos del Instituto Nicaragüense de Energía (INE) revelan que hasta la trigésima sexta semana del 2021, se han registrado 27 alzas y nueve bajas en la gasolina regular y súper; 23 alzas y 13 bajas en el diésel, “debido a las fluctuaciones en los precios de referencia internacional de estos productos”.

El especialista sostuvo que los nicaragüenses, con el fin de solventar los gastos de la cesta, han reducido la ingesta de alimentos y están adquiriendo productos de menor calidad, lo que trae consigo repercusiones en la salud de la persona.

Lea también: Canasta básica, de 53 productos, baja en julio 39 córdobas, según datos del Gobierno

“Lo primero que hacen los nicaragüenses es reducir el consumo, si comían tres veces, ahora comen dos y si comían una porción bastante aceptable para el consumo humano, ahora comen la mitad o bien, están tratando de estirar la cantidad de alimentos para evitar mayores gastos”, aseguró.

Asimismo, indicó que “la gente anda tratando de consumir alimentos que sean baratos, o en lugares donde los ofertan a bajo precio, pero son de mala calidad. En este caso la salud se ve golpeada y del estado alimentario de una persona se pueden derivar otras enfermedades, por ejemplo, estomacales, emocionales, etcétera”, concluyó.

Economía

Puede interesarte

×

El contenido de LA PRENSA es el resultado de mucho esfuerzo. Te invitamos a compartirlo y así contribuís a mantener vivo el periodismo independiente en Nicaragua.

Comparte nuestro enlace:

Si aún no sos suscriptor, te invitamos a suscribirte aquí