Un total de 17 congresistas estadounidenses emitieron una carta para el secretario del Departamento de Estado de Estados Unidos, Antony Blinken, en la que instan a la administración de Joe Biden a tomar acciones más “firmes y rápidas” en respuesta a las últimas olas de acciones represivas y antidemocráticas del régimen de Daniel Ortega, luego que este mandara a encarcelar a al menos 13 líderes opositores, entre ellos cuatro precandidatos presidenciales.
“Escribimos para instar a una respuesta firme y rápida del gobierno de los Estados Unidos al rápido descenso de Nicaragua hacia la consolidación de una dictadura de partido único. Como saben, en poco más de una semana el régimen de Ortega ha detenido ilegalmente a siete líderes de la oposición y varias otras personas afiliadas a la oposición política u organizaciones no gubernamentales. Todos se enfrentan a cargos legales sin mérito, desprovistos de derecho substancial, estos arrestos son considerados violaciones graves de derechos humanos y detenciones arbitrarias”, señalan los congresistas en la misiva. Por tanto, alertan que “dado el rápido ritmo de la represión, esperamos que la situación se intensifique y el régimen envalentonado seguirá apuntando a los actores vulnerables de la sociedad civil, incluidos los activistas juveniles, los periodistas y los líderes religiosos en los próximos días y semanas”.
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A la vez, expresan que la proximidad a las elecciones en el país no es una coincidencia, y por eso Ortega pretende silenciar a sus contrincantes e impedir un proceso electoral libre y justo. Lamentan que cualquier esperanza de un proceso electoral legítimo se está deteriorando rápidamente, porque el régimen está eliminando la oposición política.
Respaldan recientes sanciones a aliados del régimen
“La acción del régimen Ortega-Murillo merece una respuesta inequívoca e inmediata”, insisten los congresistas. Tanto así que extendieron su agradecimiento y apoyo pleno a las sanciones del pasado 9 de junio a cuatro miembros del círculo íntimo de Ortega, incluida Camila Ortega, hija de la pareja dictatorial.
“Lo instamos a que continúe trabajando con el Departamento del Tesoro para aplicar más medidas específicas contra las personas del Ejército, la Policía y el Ministerio de Justicia que han ordenado y llevado a cabo estas violaciones de derechos humanos”, solicitaron.
Además agregaron que “se debe hacer todo lo posible para coordinar las sanciones con Canadá, la Unión Europea y los socios regionales en América Latina y el Caribe. También le pedimos que ejerza el liderazgo de los Estados Unidos dentro del Consejo Permanente de la Organización de los Estados Americanos (OEA) para revisar las consecuencias de las violaciones de Nicaragua a la Carta Democrática Interamericana y su incumplimiento prolongado de las reformas electorales ordenadas por la OEA”.
“Los Estados Unidos y los socios internacionales deben aplicar una presión diplomática y económica específica en el círculo íntimo del régimen de Ortega mientras minimizan las consecuencias residuales para el pueblo de Nicaragua. Antes de dos recientes y devastadores huracanes y la pandemia mal gestionada, Nicaragua ya era el segundo país más pobre del hemisferio occidental. Estamos tomando todo esto en consideración al pedir sanciones individuales contra los funcionarios que socavan la democracia, cometen abusos contra los derechos humanos o participan en actos de corrupción”, sostienen.
Demandan la liberación inmediata de los opositores detenidos
Los congresistas también se sumaron a las decenas de llamados de la comunidad internacional en demanda a la liberación inmediata de los líderes opositores y por los más de cien presos políticos que aún mantiene la dictadura en las cárceles del país.
“Nos sumamos a su llamado a la liberación inmediata e incondicional de Cristiana Chamorro, Juan Sebastián Chamorro, Félix Maradiaga, Arturo Cruz, Violeta Granera, José Adán Aguerri, y de los 120 presos políticos que se encuentran actualmente detenidos en Nicaragua. Estamos dispuestos a trabajar con ustedes en apoyo del esfuerzo del pueblo nicaragüense para recuperar su democracia”, finaliza la misiva de los congresistas.
Los congresistas que firmaron la carta dirigida al secretario de Estado son Albio Sires, presidente del Subcomité sobre el Hemisferio Occidental, Seguridad Civil y Comercio; Gregory Meeks, presidente del Comité de Asuntos Exteriores; Mark Green, miembro destacado del Subcomité del Hemisferio Occidental; Michael McCaul, miembro del Comité de Asuntos Exteriores; Ted Deutch, María Salazar, Stephanie Murphy, August Pfluger, Joaquín Castro, Young Kim, Darren Soto, Adam Kinziger, Karen Bass, Jaun Vargas, Asam Schiff, Debbie Wasserman Schultz y Vicente González.
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Bod Menéndez y Marco Rubio presionan por acciones
El presidente del Comité de Relaciones Exteriores, Bod Menéndez y el senador Marco Rubio, también expresaron su preocupación por la situación en Nicaragua, emitiendo una misiva al Secretario de Estado, Blinken, en la que advierten que la crisis del país se está deteriorando a un ritmo alarmante y requiere una acción continua por parte de la administración Biden.
“El régimen de Ortega está llevando a cabo una represión generalizada destinada a derribar las esperanzas de elecciones libres y justas en noviembre y consolidar una tercera dictadura en las Américas. Esta toma de poder autoritaria plantea desafíos directos a la seguridad nacional de Estados Unidos, la estabilidad regional y genera una profunda preocupación entre los nicaragüenses-estadounidenses en los Estados Unidos. La situación debe afrontarse con una respuesta coordinada de la comunidad internacional”, manifestaron los altos funcionarios de Estados Unidos.
Sobre la detención de losa lideres opositores y los precandidatos presidenciales, Menéndez y Rubio, calificaron a Ortega de estar utilizando un lenguaje reciclado de la década de 1980 para justificar una creciente campaña de represión. “El régimen de Ortega está silenciando sistemáticamente las voces democráticas que critican sus acciones autoritarias. Los líderes de la oposición, la sociedad civil y el sector privado deben ser puestos en libertad de inmediato”, lamentaron.
Coordinación con aliados para sancionar
Los congresistas recordaron que en marzo, presentamos la Ley bipartidista de Reforzamiento de la Adherencia de Nicaragua a las Condiciones para la Reforma Electoral (RENACER), que establece pasos claros para la política estadounidense y proporciona una hoja de ruta para las acciones que la administración de Biden tome para abordar el régimen de Ortega.
Por lo tanto demandan “primero, necesitamos unir la diplomacia estadounidense y nuestras sanciones específicas para responsabilizar a los funcionarios del régimen que han desmantelado las perspectivas de elecciones democráticas en Nicaragua. Este enfoque debe coordinarse con nuestros socios más cercanos en Canadá y la Unión Europea. Nuestras sanciones son más efectivas cuando se alinean con las acciones de nuestros aliados”, destacan en la misiva.
En segundo lugar, “Estados Unidos debe fortalecer su enfoque para enfrentar la corrupción perpetrada por miembros del círculo íntimo del régimen de Ortega y sus facilitadores, incluida la familia del presidente y el vicepresidente”, y Finalmente, “debemos ampliar la supervisión agresiva de los préstamos multilaterales a Nicaragua para asegurarnos de que el régimen de Ortega y sus facilitadores no se benefician de los préstamos multilaterales. Salvaguardando el apoyo a las necesidades humanitarias del pueblo nicaragüense”, expresan.