Francisco Javier Acosta Pérez, de 33 años, fue uno de las decenas de capturados la mañana de este domingo por antimotines orteguistas que asediaron con bombas lacrimógenas y balas la marcha cívica “Somos la voz de los presos políticos”, que se desarrolló en la capital, contra el régimen de Daniel Ortega y su esposa Rosario Murillo.
Acosta Pérez, quien también es promotor de donación de sangre para la Cruz Roja Nicaragüense, iba marchando junto a varios muchachos con sus bandera y pañoletas azul y blanco, cuando se vieron obligados a dirigirse por el tope sur de Bello Horizonte, por el asedio de los antimotines, quienes al verlos en un callejón sin salida los rodearon y empezaron a capturar.
“Algunos se metieron a casas particulares, pero los antimotines entraron violentamente a las casas a sacarlos a golpes y arrastrados”, expresó llorando una señora que logró ayudar a algunos jóvenes.
Según los manifestantes los antimotines venían detrás de la marcha disparando y tirándoles bombas lacrimógenas para dispersarlos y lograr capturarlos.
Fotos: Así atacaron las turbas orteguistas y los antimotines a los manifestantes
“Se llevaron más de 30 chavalos de una sola vez en ese sector de Bello Horizonte. También nos reportaron más detenciones en todo el recorrido de la marcha”, dijo otra de las participantes.
Hasta el mediodía, se reportaban otras decenas de personas desaparecidas luego que paramilitares y policías atacaran a balazos la marcha cívica y mataran a un adolescente e hirieron a varias personas más.
La represión a la marcha cívica en demanda de la libertad de los reos políticos y democracia se da un día después que Ortega salió a agitar a sus masas políticas y amenazar con más represión e intervención policial contra el pueblo opositor, en un virulento discurso de odio contra la oposición.