Paramilitares armados y encapuchados incendiaron la madrugada de este miércoles la casa donde habitan los padres de Yubrank Suazo, representante del Movimiento 19 de Abril en Masaya.
El grupo armado presuntamente estaba en busca de Suazo y, al no encontrarlo, quemaron su casa de habitación ubicada en el barrio San Juan. El fuego se propagó a una segunda vivienda, propiedad de Elmer Suazo, primo del líder universitario.
Lea también: Masaya en resistencia ante la represión de Daniel Ortega
Suazo responsabiliza del incendio, ocurrido a eso de las 2:00 de la madrugada al alcalde orteguista de Masaya, Orlando Noguera, y a Eliseo Ramírez, dirigente de las turbas en esta ciudad.
“Hoy mi familia fue víctima de la persecución del orteguismo, por mi trabajo, por mi apoyo a la causa del pueblo con demandar libertad, democracia y paz para todas las familias nicaragüenses”, dijo Suazo.
Le puede interesar: Paramilitares secuestran al menos a cinco personas en Masaya
El líder universitario comentó que “hoy es un día triste y doloroso para mi familia y para mí. Pero le digo a esos personeros del orteguismo: Orlando Noguera y Eliseo Ramírez, que si pensaron o pretendían callarme, no lo van a lograr”.
Tras quema pierden trabajo
En una de las viviendas estaba ubicado el reconocido Taller de Hamacas Suazo, que constituía una fuente de empleo para varios habitantes de la zona. De momento se desconoce la cantidad de dinero en pérdidas.
Suazo fue uno de los que junto a miembros de la sociedad civil, comerciantes y transportistas rechazaron cualquier autoridad orteguista en Masaya y convocaron a un autogobierno municipal.
También desmintió el pasado lunes, la autenticidad de un acuerdo que circulaba en las redes sociales, donde se afirmaba que el Movimiento 19 de Abril, permitiría que el repliegue táctico llegara a la ciudad, se comprometía a retirar las barricadas y a no realizar manifestaciones antigubernamentales.
El líder universitario ya no vivía con sus padres porque se cambió de casa para evitar ponerlos en riesgo. “Esto me compromete cada vez más a estar del lado del pueblo, del lado de las víctimas, del lado de los que sufren, del lado de los que claman justicia, dijo el joven.
Desde que comenzaron las manifestaciones en Nicaragua, el 18 de abril, la ciudad de Masaya es uno de los lugares que ha plantado cara al orteguismo y el Gobierno se ha empeñado en atacar.