¿Haberle ganado 1-0 en el último partido a Guatemala en las eliminatorias al premundial lo cambia todo? En lo absoluto. La Azul y Blanco corrió con la suerte de los que ganan el billete de lotería, uno en un millón, así fueron las oportunidades en ese desafío, pero para los que señalan solo el resultado como la máxima en un duelo fue un encuentro fenomenal, que además sirvió para complicarle la vida a los chapines que buscaban cerrar su participación con ocho puntos, pero se tendrán que conformar con cinco, mientras Nicaragua quedó en el sótano con tres puntos.
No se trata de que se piense que Nicaragua no es el fondo del futbol centroamericano, lo es dejando a un lado a Belice, sino la manera con la que se vieron los muchachos en cada uno de los partidos. En el de ayer Guatemala elaboró siete disparos a la portería y seis de ellos pegaron en el poste, mientras Nicaragua con dos llegadas claras, y una terminó en gol, el cual fue anotado en el minuto 72 por Sixto Jarquín en un contragolpe, quien hábilmente saltó sobre dos defensores y con la cabeza dejó sin aliento a los guatemaltecos.
Eso fue todo para Nicaragua, que quedó con 10 jugadores tras la expulsión de Óscar Acevedo, ni se puede decir que resistió su defensa, debido a que fue vulnerada por completo, pero no era el día de los delanteros del contrario que con plena impotencia, se fueron a casa pensando en que el partido pudo ser una goleada, pero ese pudo fue el maquillaje de la Azul y Blanco, que sumó una victoria y tres derrotas.