La Policía, al servicio de la dictadura Ortega Murillo, desalojó a siete de los ocho sacerdotes que permanecían en el Seminario Interdiocesano Nuestra Señora de Fátima en Managua este miércoles, dijo a LA PRENSA la investigadora, abogada y autora de los informes Nicaragua, ¿una Iglesia perseguida?, Martha Patricia Molina Montenegro.
El líder estudiantil en el exilio, Lesther Alemán, informó en su cuenta de X que los sacerdotes fueron desterrados a Roma. LA PRENSA le consultó al cardenal Leopoldo Brenes sobre el tema y se limitó a decir que no tiene información porque andaba en una reunión.
“Fijate que no tengo información porque yo andaba en otra reunión. No tengo información porque andaba fuera de aquí de la casa”, dijo Brenes y cortó la llamada.
Según Molina, se desconoce el lugar al que fueron trasladados, pero las fuentes le informaron que en el Seminario el único que quedó fue monseñor Frutos Valle Salmerón, administrador ad omnia de la Diócesis de Estelí.
Los sacerdotes desalojados del Seminario de Fátima son: monseñor Ulises Vega Matamoros, monseñor Edgar Sacasa Sierra, padre Víctor Godoy, padre Jairo Pravia Flores, padre Marlon Velásquez, fray Silvio Romero y el padre Harvin Tórrez.
Podría haber más arrestos contra sacerdotes
Además Molina dijo este miércoles a este medio de comunicación que es posible que la ola de arrestos en las Diócesis de Matagalpa y Estelí continúe.
“Sacerdotes del norte del país han sido visitados en esta semana y amenazados. Posiblemente sean secuestrados”, dijo Molina quien señaló que al menos en las diócesis de Estelí y Matagalpa podría haber un interés del régimen de dejar a las parroquias sin sacerdotes.
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La Iglesia católica de Nicaragua, particularmente la Diócesis de Matagalpa, vive una intensa crisis de persecución que se intensificó entre el 1 y 2 de agosto cuando el régimen de Daniel Ortega y Rosario Murillo ordenó la detención de siete sacerdotes, la mayoría pertenecientes a la jurisdicción que administra monseñor Rolando José Álvarez, excarcelado y desterrado a Roma.
En declaraciones anteriores brindadas a LA PRENSA, Molina denunció que “la mayoría de los curas secuestrados fueron llevados con violencia y algunas propiedades, como las casas curales, fueron allanadas y se robaron los equipos como computadoras y celulares”.
Dictadura recrudece represión contra la Iglesia católica
El periodista especializado en temas religiosos, Israel González Espinoza, en declaraciones anteriores a LA PRENSA, dijo que el régimen Ortega Murillo está recrudeciendo la represión contra la Iglesia católica, aunque el hostigamiento, las amenazas y la vigilancia permanecieron aún después del destierro de 19 religiosos, entre los que se incluyó a monseñor Rolando Álvarez, obispo de Matagalpa, el 14 de enero de 2024.
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“Pareciera que la intención es dejar sin sacerdotes a los feligreses de las diócesis de Estelí y Matagalpa. De lo que sí se puede hablar es de una intensificación de la persecución religiosa. Las parroquias siguen asediadas, los sacerdotes siguen bajo vigilancia, no se permite expresar libremente la fe por medio de procesiones, a menos que sean muy vigiladas. Por lo tanto, se está evidenciando que el régimen utiliza la crisis en Venezuela para hacer de las suyas en Nicaragua”, dijo González Espinoza.