El secretario de la Pontificia Comisión para América Latina, Rodrigo Guerra López, se refirió a la persecución del régimen Ortega Murillo contra la Iglesia católica y el silencio del papa Francisco ante las arremetidas de la dictadura contra religiosos y feligreses.
En 1958, el papa Pío XII creó la Pontificia Comisión para América Latina. El objetivo principal de este organismo es asesorar y asistir a las iglesias particulares de América Latina en cuestiones pastorales.
Guerra expresó que las declaraciones públicas no construyen acuerdos, sino que estos deben hacerse buscando oportunidades.
“Las declaraciones tienen su rol y su importancia, pero no son las que construyen acuerdos que muchas veces se tienen que hacer de manera lenta, buscando áreas de oportunidad y preservando que el pueblo no sea sacrificado”, dijo Guerra en declaraciones al Canal Trece de la cadena española Cope.
Diplomacia discreta y efectiva
Guerra también señaló que la diplomacia “discreta” no es tan rápida como las declaraciones en redes sociales y expresó que en Nicaragua existe una situación muy tensa.
“Los acuerdos se realizan más bien a través de la diplomacia discreta y efectiva, que no avanza a la velocidad del Twitter, sino que lo hace lentamente y más cuando hay una situación realmente complicada como la que se vive en Nicaragua, donde la situación está muy tensa, no solo con la Iglesia”, señaló.
La dictadura Ortega Murillo continúa con la ola de secuestros contra sacerdotes y laicos en Matagalpa. Este lunes, activistas y opositores denunciaron el arresto del sacerdote Jarvin Tórrez, rector del Seminario de Filosofía San Luis Gonzaga y párroco de la iglesia Santa María de Guadalupe, en el barrio Guanuca, de la Diócesis de Matagalpa.
Con el arresto de Tórrez, ya suman nueve sacerdotes que el régimen ha detenido desde el pasado 27 de julio, cuando inició una nueva etapa de acoso y detenciones a líderes religiosos.
Lea también: Dictadura secuestra al sacerdote Jarvin Tórrez y a una secretaria de una iglesia de Sébaco
El 18 de octubre de 2023, el régimen Ortega Murillo expulsó del país a 12 sacerdotes que mantenía en prisión a raíz de negociaciones con el Vaticano, según reveló la dictadura.
Posteriormente, el 14 de enero de 2024, el régimen expulsó a monseñor Isidoro Mora, obispo de Siuna; monseñor Rolando Álvarez, obispo de Matagalpa y a otros 17 religiosos, en su mayoría arrestados a finales de diciembre de 2023.
Papa Francisco promueve el diálogo
Según Guerra, el papa Francisco trata de “ayudar a todos” a través del diálogo antes que las declaraciones públicas “exaltadas”.
“El papa Francisco está tratando de ayudarnos a todos desde todos los ángulos de compromiso político a que redescubramos la importancia del diálogo y el encuentro para la resolución de controversias. Porque optar por declaraciones exaltadas de uno o del otro lado, normalmente conduce a situaciones indeseables de violencia”, refirió.
Añadió que la Iglesia actúa a través de congregaciones religiosas, obispos y movimientos laicales que contribuyen “a la distensión” a través de la predicación del evangelio.
“Los silencios del papa nunca son apáticos, sino que siempre son orantes, actuando con prudencia y sabiduría, no siempre a nivel de declaraciones”, puntualizó.