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Propaganda para llenar Universidad Casimiro Sotelo, instalada sobre lo robado a la Universidad Centroamericana (UCA). Foto: Tomada de Canal 2.

Dictadura inicia propaganda para llenar Universidad Nacional Casimiro Sotelo

Los orteguistas realizaron acto de apertura en la entrada principal de las instalaciones robadas a la Universidad Centroamericana, y a través de parlantes invitaban a recibir información sobre las carreras que ofrecen

La dictadura de Daniel Ortega y Rosario Murillo busca desesperadamente estudiantes para la matrícula de la Universidad Nacional Casimiro Sotelo Montenegro, instalada sobre el campus robado a la Universidad Centroamericana (UCA).

Con parlantes y música llamaron este lunes durante toda la mañana a los transeúntes para acercarse y recibir información sobre las carreras que impartirán.

En el acto, según las publicaciones de los medios de propaganda orteguista, participó parte del personal de la Casimiro Sotelo, portando la bandera del Frente Sandinista en el cuello, además de integrantes de la Juventud Sandinista, que hacían bulto en la entrada principal del recinto.

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Los reportes refieren que el orteguismo abrió las puertas de la Casimiro Sotelo para “dar continuidad a la educación con el proceso de prematrículas y matrículas de reingreso y nuevo ingreso”. Sin embargo, los mismos reportes orteguistas se contradecían, indicando que el “proceso de prematrícula ordinaria estará comprendido del próximo 27 de noviembre al 6 de diciembre y la prematrícula extraordinaria del 11 al 16 de diciembre”.

Imponen más control en el ingreso a las instalaciones

En el área de registro académico había un buen grupo, de entre 15 y 20 personas, buscando reingreso, ingreso o información de las carreras que se impartirán en esa universidad.

En el portón principal, los vigilantes solicitan la cédula de identidad en físico y ordenan revisión de bolsos y mochilas para todo el que ingrese a la propiedad.

Además, en los alrededores del recinto robado a la UCA el orteguismo también aumentó la presencia policial, que habían reducido posterior a la confiscación de facto de esa casa de estudios, ubicando agentes de tránsito a bordo de motocicletas, en al menos tres puntos aledaños a la propiedad.

Estudiantes deben presentar “récord de Policía”

Los medios de propaganda orteguista detallaron que las personas que deseen estudiar y prematricularse en la Casimiro Sotelo, instalada sobre lo robado a la UCA, deben presentar: “Original de certificado de conducta (récord de Policía), copia de cédula de identidad; original y copia del diploma de bachiller, original de certificados de calificaciones de noveno, décimo y undécimo grado de secundaria, dos fotos tamaño carnet y un folder”.

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Además, aseguraron que los estudiantes que se reintegren a esta casa de estudios superiores (los estudiantes afectados por la confiscación a la UCA), deberán matricularse entre el 4 y el 16 de diciembre, mientras que los que se matricularán como nuevo ingreso tienen que presentarse entre el 8 y 13 de enero del 2024.

El inicio de clases del año lectivo 2024, la Universidad Casimiro Sotelo aseguró que será el próximo 15 de enero de 2024.

Confiscación de facto a la UCA

La Universidad Centroamericana, de la orden de la Compañía de Jesús, suspendió operaciones el 16 de agosto pasado, luego que la dictadura le envió un oficio en que la acusaba del supuesto delito de “terrorismo” y ordenaba la confiscación de sus bienes, incluyendo el recinto en el que fue montada la Universidad Nacional Casimiro Sotelo.

Vea: Estudiantes de la UCA buscan alternativas para continuar sus estudios tras confiscación

El mismo 16 de agosto, a eso del mediodía, la dictadura Ortega Murillo envió a decenas de policías a tomarse el recinto de la UCA y, dos días después, inauguró la Universidad Casimiro Sotelo, alzando la bandera del Frente Sandinista, y dejando en el limbo a más de 5,000 estudiantes que acogía la UCA.

Actualmente, se conoce que más de 3,000 estudiantes de los afectados con el cierre y confiscación a la UCA se han acercado a las universidades jesuitas hermanas en Centroamérica, solicitando ser aceptados para continuar sus carreras.

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