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CONTENIDO EXCLUSIVO.Mientras aniquila y trata de borrar todo vestigio del rol que por siempre jugó la gran empresa en el crecimiento y desarrollo, y convierte a Nicaragua en el segundo país del continente sin organizaciones gremiales, los especialistas advierten que el régimen Ortega Murillo encamina la economía hacia la cubanización. Modelo estatizado que tras décadas de fracaso, recientemente comenzó a girar hacia el libre mercado. Y paralelamente impulsa el modelo de economía creativa, para disfrazar la deplorable informalidad que domina el mercado laboral nicaragüense.
Para el exreo y desterrado político Félix Maradiaga, el cierre del Consejo Superior de la Empresas Privada (Cosep) y de las cámaras que lo integraban es un paso más hacia el acelerado camino de la “cubanización”. Y un golpe a la economía y el bienestar de todos los nicaragüenses, sin excepción. Ya que aniquila la posibilidad de crear oportunidades de crecimiento y empleos de calidad.
Esta cubanización se concretaría mediante la confiscación de bienes cuya administración la asume el Estado. Tal como ocurrió con frigoríficos, bodegas, centros de capacitación, laboratorios, instancias de arbitraje y otros, confiscados recientemente a las 19 organizaciones empresariales a las que despojaron de su personería jurídica.
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Traslado forzado de las empresas
Otro mecanismo paralelo a la confiscación es la adquisición de empresas por parte del círculo cercano a los Ortega Murillo. Esto según el economista y exdiputado Enrique Sáenz es el plan que tienen para muchas medianas y grandes empresas. “Estamos ante el escenario de un traslado forzado de propiedades privadas al círculo de mafiosos de la dictadura. Seguramente ya el segmento empresarial de la camarilla en el poder se está frotando las manos ante la posibilidad de aprovechar el temor que provoca la medida para comprar a precio de guate mojado empresas de nicaragüenses que prefieren liquidar su capital”, advierte Sáenz.
Desde el exilio, Sáenz dice que otro método utilizado es “actuar a la Vito Corleone”. Diciendo a los empresarios “te voy a hacer una oferta que no podés rechazar“. Así adquieren porcentajes de acciones de las empresas y dejan la administración en el legítimo dueño. A cambio, le garantizan protección frente al acoso fiscal de la Dirección General de Ingresos (DGI), Dirección General de Aduanas (DGA), Alcaldías y cualquier otra que pueda surgir. “Esto no es una fantasía. Ya ha ocurrido, solo recordemos cómo adquirieron el Canal 8 y el Canal 2, solo para citar dos casos”, dice Sáenz.
Con estas estrategias se pone en riesgo la generación de empleos, especialmente de calidad con buenos salarios. Hay que recordar que según el Banco Mundial, las empresas privadas son la columna vertebral de las economías en desarrollo. Ya que generan nueve de cada diez empleos y a través del pago de impuestos los recursos para financiar las obras de infraestructura que los países necesitan.
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Economía creativa para el círculo familiar
Por su parte, Lucy Valenti, expresidenta de la Cámara Nacional de Turismo de Nicaragua (Canatur), advierte que estas decisiones empeoran la inestabilidad y asestan un terrible golpe a las condiciones para desarrollar negocios. “Esto profundiza la radicalización del país y lo lleva cada día más a la destrucción económica, tal a como pasó en Cuba. (Daniel Ortega) está haciendo lo contrario de lo que está haciendo ahora su par de Venezuela (Nicolás Maduro) que está buscando rescatar la economía venezolana”, señaló Valenti.
Pero junto a la amenaza latente que pende sobre la mediana y gran empresa, a través de su hija Camila los Ortega Murillo le destinan todo tipo de recursos al empuje de la economía creativa. La anuncian como complemento de la economía convencional. Según economistas locales, el problema es que en Nicaragua no se impulsa el concepto impulsado por John Howkins, conocido como el padre de la economía creativa. Él acuñó este concepto refiriéndose a herramientas de desarrollo económico que se fundamenta en la generación de nuevas ideas.
Sin embargo, economistas han advertido que en Nicaragua no la están utilizando para potenciar el desarrollo y el crecimiento económico, a través de la generación de empleos, las exportaciones, la inclusión social y la diversidad cultural, entre otros elementos. Sino para “potenciar las artes del círculo familiar” de los Ortega Murillo. La actividad estrella es Nicaragua Diseña donde Camila Ortega primero sació sus deseos de ser modelo y luego tomó el control de los emprendedores.
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Disfrazan la informalidad laboral
Para Sáenz, utilizar el concepto “emprendedores” es una manipulación hipócrita de la dictadura para esconder la magnitud de la economía informal, que aglutina a gran parte de la fuerza laboral del país.
“Según datos oficiales, el 80 por ciento de los trabajadores nicaragüenses laboran en la economía informal. Llamarles emprendedores es escarnecer el sacrificio de mujeres y hombres que se ganan el pan de cada día, de sol a sol, para sobrevivir sin ningún tipo de protección laboral. Son trabajos precarios, de sobrevivencia, ante la incapacidad del modelo económico impuesto por Ortega de generar empleos formales y estables”, asegura Sáenz.
Además, recuerda que en la economía informal las mujeres, por ejemplo, en caso de embarazo, no tienen descanso pre ni posnatal. Y en general, los trabajadores informales no tienen vacaciones, no reciben aguinaldo ni subsidio en caso de enfermedad o accidente. Y en la mayoría de los casos ni siquiera ganan el salario mínimo. “Entonces es una burla siniestra de parte de la dictadura”.
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Florecen las inversiones de subsistencia
Asimismo es evidente que tanto en Managua como en las principales ciudades del país están floreciendo las inversiones de subsistencia. Es decir, los pequeños negocios especialmente en el sector comercio y servicios. Esto surgen en respuesta al incremento del desempleo, pero también del consumo interno por el fuerte crecimiento de las remesas que envían del exterior.
“Tiendas en línea, comercio electrónico, pequeños restaurantes y negocios que ofrecen diversos servicios. Estos son resultado del incremento del desempleo y la necesidad de sobrevivir. También hay que tener en cuenta que el incremento de las remesas podría estar impulsando el consumo interno, especialmente en lo referido al ocio y los desempleados están aprovechando esta oportunidad para emprender“, dice un especialista en comercio exterior, quien solicita anonimato.
El especialista considera que el comercio y los servicios serán los grandes ganadores y más dinámicos de la economía, ya que con pequeñas inversiones se puede generar una fuente de sobrevivencia con un pequeño negocio. En el otro extremo, advierte que el sector agropecuario y la construcción serán los más afectados, ya que estos requieren de grandes inversiones para fomentarlos, y en el contexto actual no se vislumbran inversiones de este tipo”, asegura.
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