A partir de este viernes al caer la tarde más de 180 mil trabajadores del Estado comenzarán a gozar de un largo fin de semana y los empleados del sector privado lo comenzarán a disfrutar desde el mediodía del sábado, luego que el Ministerio del Trabajo (Mitrab) confirmara que el Día de las Madres, el próximo 30 de mayo, será feriado nacional tras la reforma relámpago al Código del Trabajo este mes.
El 18 de este mes los diputados orteguistas aprobaron declarar el Día de las Madres nicaragüenses como feriado y el 20 finalmente apareció publicado en La Gaceta, con lo que oficialmente el día debe ser descansado con goce de salario. Es decir no debe afectar las vacaciones.
Esta es la primera vez que los nicaragüenses celebrarán ese día especial como un feriado nacional, puesto que antes implicaba una negociación entre el empleado privado y el empleador, y en el caso del Estado se declaraba asueto para su planilla.
El Ministerio del Trabajo dijo que de acuerdo con el artículo 69 del Código del Trabajo no quedan sujetos a este feriado los “trabajos que no sean susceptibles de interrupción por su naturaleza o por las índoles de necesidades que satisface y que puedan afectar las actividades económicas, sociales y de seguridad del país”. Estas personas, según la ley, deben recibir un pago extraordinario o bien se puede reponer con un día libre en el resto de la semana.
La declaración nacional como feriado el Día de las Madres en Nicaragua ha generado rechazo por parte de la Asociación Madres de Abril, especialmente las que perdieron a sus hijos durante la masacre que el régimen de Ortega ejecutó durante una marcha que se organizó el 30 de mayo, hace cuatro años, para recordar a los caídos en las protestas de abril del 2018.
Las madres consideran la medida como un mensaje de la dictadura de burla hacia la tragedia, por lo que han llamado a declarar ese día como Día de Luto Nacional, por los que perdieron la vida durante la histórica marcha, donde los manifestantes fueron atacados por turbas orteguistas, que sin misericordia dispararon contra los jóvenes.
“Nicaragua está de luto, porque nuestros hijos fueron asesinados bajo la orden dada por Ortega-Murillo de disparar a matar, con tiros certeros ejecutados por las fuerzas policiales, paramilitares, francotiradores, apoyados por grupos de choque sandinista, con alevosía y ensañamiento por haberse unido a una lucha cívica”, dijeron en un comunicado las madres de los asesinados, tras conocerse el proyecto de ley que declaraba ese día como feriado.
“Ante la declaración del 30 de mayo como feriado nacional, decretada por la dictadura: declaremos el 30 de mayo ¡Día de Luto Nacional! ante la negación del régimen de reconocer los crímenes de lesa humanidad cometidos. Ante la negación de investigar los hechos. Ante la mentira que pretende imponer la dictadura: usamos nuestras inteligencias y conocimientos desde las diferentes trincheras para esclarecer la verdad e impedir la impunidad. Ante la represión que busca sembrar el terror, aunemos esfuerzos para impedir el silencio para que el clamor de las madres de Nicaragua no solo retumbe en el mundo entero, sino que los hagan suyos para allanar el camino a la verdad que lleve a los responsables de los crímenes de lesa humanidad cometidos contra los hijos e hijas de Nicaragua, a todos los tribunales”, dijo la asociación en ocasión del cuarto aniversario de que el orteguismo manchó con sangre el Día de las Madres en Nicaragua.