Se acerca el Día de las Madres, así que aprovecharemos la fecha para hablar de la alimentación de la mujer en el embarazo y lactancia materna, además de cómo la familia y particularmente la madre, tienen una importante influencia en el estado nutricional de nuestros niños y niñas.  

Primero que nada, un abrazo a todas las mamis que leen esta columna. Tener en brazos a tu recién nacido es una de las experiencias más llena de emociones que se pueda tener. Alegría, mucho cansancio, temor incluso tristeza y todo de una sola vez. 

La nutrición de la embarazada 

Uf, en este período de la experiencia humana, en el que se crea un nuevo ser, suceden un montón de cambios en nuestro cuerpo. Aparte, además de sus necesidades nutricionales normales, la mujer embarazada debe proporcionar nutrientes y calorías para el feto, el líquido amniótico, la placenta y el aumento en el volumen de sangre y el tejido graso de pechos y útero. En general, se recomienda una dieta alta en nutrientes con una amplia variedad de alimentos como frutas, verduras, cereales, legumbres, carnes, pescados, huevos y lácteos.  

¿Cuáles alimentos se recomiendan evitar? Embutidos, leche cruda sin pasteurizar, quesos hechos con leche fresca sin pasteurizar, pescado crudo, pescados con alto contenido en mercurio, el alcohol, huevo crudo, carnes poco cocinadas, verduras mal lavadas. 

¿Y la lactancia qué?  

Quiero recordar que la leche materna es el mejor alimento para el lactante durante los primeros meses de vida. Se recomienda la lactancia materna exclusiva hasta los 6 meses de edad y con una alimentación complementaria adecuada, hasta los dos años de vida o más.  

 El bebé no debería ni consumir agua durante los primeros 6 meses de vida. Este alimento cubre las necesidades nutricionales para su adecuado crecimiento y desarrollo físico, y desde el punto de vista emocional le asegura el establecimiento de un buen vínculo madre e hijo y una adecuada relación de apego seguro con su madre, ambos esenciales para un correcto desarrollo como persona independiente y segura.  

¿Hasta cuándo amamantar? 

Importante: Que no podás amamantar no te hace una mala madre. La leche materna es el mejor alimento para tu bebé, sí, pero más allá de la leche materna, tu bebé necesita a una mami en paz. Si querés amamantar, pero se te dificulta, te aconsejo acercarte a un especialista en el tema. Dicho esto: Se recomienda la lactancia materna exclusiva hasta los 6 meses de edad y con una alimentación complementaria adecuada, hasta los dos años de vida o más. 

Madre e hijo o hija deben decidir hasta cuándo mantener la lactancia. Dar el pecho más allá de los 2 años de edad del lactante sigue siendo beneficioso para ambos.  

¿Y mi alimentación durante este período?  

La mayoría de madres lactantes sienten mucha hambre. Esto es normal ya que tu cuerpo está usando extraenergía para producir leche. Al igual que en el embarazo, se recomienda una dieta alta en nutrientes y variada. ¡Recordá hidratarte muy bien! 

Y nunca está de más recordar que el rol del padre también es fundamental. En efecto, él no puede dar el pecho pero SÍ puede ejercer su rol como padre informándose sobre la lactancia y el comportamiento de su bebé, ocupándose de las tareas domésticas, de cambiar pañales, bañar al bebé, entre otras cosas.  

La alimentación de la madre y su influencia en la niñez 

Es de suma importancia la alimentación en la niñez ya que influye para el resto de la vida de las personas. Hablamos un poco más sobre el tema hace unos cuantos artículos atrás. Toca aquí para leerlo.