Vecinos de la emblemática colonia El Periodista denuncian que el Ejército de Nicaragua, en contubernio con la Alcaldía de Managua, intenta “apropiarse” de un terreno comunal perteneciente a esta zona residencial de reporteros en su mayoría, que la han conservado como su área verde desde la fundación, debido al paso de la falla Tiscapa en ese punto.
LA PRENSA envió en tres ocasiones consultas vía correo electrónico y WhatsApp al área de Relaciones Públicas del Ejército de Nicaragua para conocer si están al tanto de esta información, la denuncia y del supuesto abogado que llegó en representación de la institución castrense, sin embargo, las consultas no han sido contestadas tras tres días de espera.
Un ciudadano habitante de la colonia, y que forma parte de una comisión que está denunciado el hecho, comentó a LA PRENSA bajo anonimato que aproximadamente hace más de dos meses una persona desconocida, a bordo de una camioneta blanca, anduvo fisgoneando “de manera escondida” el terreno comunal.
Agregó que semanas después el hombre reapareció acompañado de un grupo de personas —con aspecto de obreros—, a limpiar el terreno y cercarlo, acción que según la fuente, fue impedida por los habitantes de la colonia que llegaron a reclamar al desconocido, quien finalmente se identificó como abogado del Ejército.
«Esa persona se identificó como abogado del Ejército, se llama Roberto Pasquier y llegó acompañado de un funcionario de la Alcaldía que lo apoyaba y ambos decían que ese terreno siempre ha sido del Ejército», manifestó la fuente.
Otros habitantes de la zona también confirmaron, bajo anonimato, la presencia del supuesto abogado identificado como del Ejército, aunque prefirieron no brindar más detalles al respecto.
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Ampliación de pista despierta interés
El poblador, que declaró a LA PRENSA bajo anonimato, cree que el interés de la institución militar de hacer uso del terreno comunal surge por el proyecto de ampliación de la pista Juan Pablo II que ejecutará la Alcaldía y que terminará afectando una parte de la plaza comercial Caracol, que forma parte del emporio económico con el que cuenta el Instituto de Previsión Social Militar (IPSM), del Ejército.
«En estos casos, lo que ha estado haciendo la Alcaldía con todas esas edificaciones que estaban metidas dentro del derecho de vías es resarcir a los dueños para que destruyan eso y se alejen. Plaza Caracol tiene derecho a ser recompensada por la Alcaldía de Managua», sugirió la fuente.
Por otro lado, aseguró que el grupo de pobladores que impidió que se cercara el terreno acordó con el supuesto abogado del Ejército y la Alcaldía programar una asamblea en el parque de la colonia para que estos demuestren con escrituras que en verdad son dueños del área verde, «pero la asamblea nunca se realizó porque obviamente ellos no tienen ningún documento legal que muestre que es propiedad de ellos».
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Gobierno donó terrenos
El gobierno del Frente Sandinista, después de perder las elecciones, donó los terrenos a la Unión de Periodistas de Nicaragua (UPN) a inicios de 1990 y el proyecto fue ejecutado durante el gobierno de doña Violeta Barrios de Chamorro a través del Instituto de la Vivienda Urbana y Rural (INVUR). Las casas fueron pagadas por los adquirientes.
Años después, la colonia se inauguró con 230 viviendas, donde habitaban periodistas, fotógrafos, camarógrafos, locutores, presentadores, entre otros ciudadanos que hasta entonces no tenían vivienda propia. Aunque el lugar fue creado para que residiera gente del gremio, en la actualidad habitan personas de diversas profesiones que han comprado o rentan las viviendas.
La fuente consultada bajo anonimato manifestó que por ahora los directivos dela UPN están en “pláticas” con los representantes del Ejército y la Alcaldía para llegar a un acuerdo. LA PRENSA le envió mensajes a la presidenta de la organización periodística, Brenda Trejos, para confirmar si esto es así, pero no contestó los mensajes.
El abogado Gonzalo Carrión, del Colectivo de Derechos Humanos Nicaragua Nunca +, explicó que para que un terreno o área verde deje de pertenecer a una persona, asociación o comunidad, primero debe de haber un proceso jurídico donde se determine la pertenencia de la propiedad.
«En ese sentido, la Constitución prohíbe la confiscación y expropiación. Esta última es solo con una previa y justa indemnización. Si alguien dice que les pertenece, entonces los reclamos son conforme el derecho y no a la brava, ocupando o expropiando. Eso está como de común, el ejemplo son las organizaciones que van cerrando, que no les permiten que transfieran los bienes a otra asociación que pueda estar ejerciendo una acción social», explicó el abogado.
Lo que propone la comunidad
Los habitantes de la colonia no están dispuestos a perder el terreno comunal que desde hace 28 años vienen conservando. Sin embargo, según la fuente, los pobladores estarían dispuestos a cederlo al Ejército siempre y cuando haya una permuta o intercambio legal con un terreno ubicado al sur de la colonia y que le pertenece a la Academia Militar.
«Si el Ejército está tan interesado en el área comunal que haya una permuta con un terreno de las mismas dimensiones que actualmente pertenece a la Academia Militar y que no está siendo ocupado. Esa sería una permuta que resolvería el problema y con una junta de vecinos se podría trabajar en la construcción de un centro recreativo o algo así de los periodistas», finalizó.