El sector textil y confección se anotó en marzo su primer crecimiento mensual después de varios meses de contracción, debido a la crisis económica derivada de la pandemia del coronavirus. Las estadísticas de la Oficina de Textiles y Ropa (Otexa, siglas en inglés), de la Administración de Comercio Internacional de Estados Unidos revelan que en marzo la tendencia cambió, ayudando a un cierre positivo en el primer trimestre, lo que a criterio de los representantes del sector es una buena noticia, aunque aún son cautelosos.
Hasta marzo del corriente año, las maquilas en Nicaragua captaron 421.75 millones de dólares desde Estados Unidos, un 6.54 por ciento más con respecto al mismo periodo del 2020, cuando ingresaron 395.86 millones de dólares, según la Otexa.
Solo en el tercer mes del año se lograron en ingresos 179.69 millones de dólares, 39.7 millones de dólares más que en igual lapso del 2020, cuando se percibieron 140.2 millones. Para entonces se acumulaba el segundo mes consecutivo de caída como consecuencia de la paralización de la economía de Estados Unidos, lo que ocasionó que las tiendas de ese país cerraran y redujeran operaciones, lo que terminó afectando las órdenes de trabajo en Nicaragua.
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El 2020 fue uno de los peores años para el sector textil y confección, el cual cerró con una caída de 21.55 por ciento respecto a 2019, lo que significó que la economía no recibiera 390.82 millones de dólares en ingresos por exportaciones de estos productos hacia Estados Unidos, su principal socio comercial.
Dean García, director ejecutivo de la Asociación Nicaragüense de la Industria Textil y Confección (Anitec), manifestó que la recuperación de marzo es un buen indicador, no obstante considera que el 2021 será apenas de recuperación de lo que se perdió en el 2020.
“Tenemos un récord de exportaciones en marzo bastante bueno que generó que pasáramos a un terreno positivo, las expectativas es que esta tendencia continúe, puede ser que el próximo mes baje un poquito, pero yo creo que ya nos hemos asentado en la parte positiva. Recordemos que esto es cíclico, los primeros tres meses son buenos, luego baja y vuelve a subir al final del año, pero hay que seguir monitoreando, si el comportamiento se mantiene podremos superar el 2020, claro que no debe ser un parámetro de comparación porque fue el peor año”, dijo García.
El secretario de la Confederación Sindical de Trabajadores de Zonas Francas (CST-ZF), Pedro Ortega, manifestó que la tendencia positiva de marzo se va a mantener, lo que va a permitir recuperar los casi 400 millones de dólares que se perdieron el año pasado.
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“Esa tendencia se va a mantener hasta cerrar el año y yo creo que vamos a ver un crecimiento con respecto al año anterior, porque vemos que la economía de Estados Unidos está un poco recuperada, la vacunación ha avanzado, en varios Estados se quitaron las medidas de restricción y eso ha permitido que abran la mayoría de las tiendas, los grandes mall y la gente empieza a comprar y también ya están abiertas las universidades que son los que compran más ropa deportiva, entonces todos esos factores están ayudando”, dijo Ortega.
Recientemente el Fondo Monetario Internacional (FMI) sostuvo que la economía de Estados Unidos superará su tamaño antes de la pandemia, pues el crecimiento alcanzará el 6.4 por ciento este año, tras una contracción de 3.5 por ciento, su mayor pérdida desde 1946.
Tímida recuperación de las órdenes de trabajo
El aumento de los ingresos estuvo impulsado también por mayores envíos de piezas textiles. Hasta marzo se enviaron a Estados Unidos 133.79 millones de metros cuadrados en prendas de vestir, lo que equivale a un leve crecimiento en volumen del 1.76 por ciento con respecto a los 131.47 millones de metros cuadrados exportados en similar periodo del 2020. (Vea infografía).
Entre las principales líneas de producto exportados destaca la ropa de algodón, cuyos envíos sumaron 72.9 millones de metros cuadrados, por un valor de 280.4 millones de dólares, es decir 5.42 por ciento más en divisas respecto al mismo periodo del 2020. Seguidos por los productos de fibra artificial, que suman 60.68 millones de metros cuadrados por un valor de 140 millones de dólares, 11.45 millones más que el año pasado cuando estos productos generaron 128.97 millones.
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García manifestó que no espera que el rebrote afecte las órdenes de trabajo porque la vacunación ha avanzado en Estados Unidos y los contagios son menores.
Lamenta cierre de empresas
Pero aunque el principal socio comercial ha dado señales de recuperación, hay otros problemas que han recaído en el sector y es el cierre de al menos dos fábricas a inicios de año: BWA de Carazo y New Holland Apparel, lo que dejó en el desempleo a más de 3,000 trabajadores.
“Es lamentable estos cierre porque reduce nuestra capacidad y nuestras expectativas de generar más empleo o de recuperar lo que habíamos perdido en el 2020, pero estamos siendo positivos que por lo menos vamos a recuperar este año el empleo perdido del año pasado”, dijo.
Asimismo refirió: “Tenemos la esperanza en los nuevos proyectos de ampliación y en la recuperación de las órdenes de trabajo”. García añadió que hay un inversionista interesado en el parque industrial que cerró en Carazo, pero señala que el desarrollo para absorber la empresa que cerró ha sido lento.