Al borde la muerte estuvo Ricardo Antonio Rizo Calderón, de 32 años, al permanecer durante cinco días en la unidad de cuidados intensivos del Hospital Manolo Morales, tras recibir nueve puñaladas propinadas por el sujeto Gerald Josué Torres Oviedo, de 19 años, quien lo interceptó para robarle a él y su pareja, Ángela del Carmen Romero Mejía, quien no sobrevivió al ataque del delincuente.
De acuerdo con el sobreviviente del asalto, fueron cuatro los delincuentes que lo asaltaron la madrugada del domingo 22 de febrero en el Reparto Schick, Distrito Cinco de Managua. Ángela Romero falleció al recibir once cuchilladas.
“Íbamos caminando en la calle oscura, ya nos dirigíamos a nuestra casa cuando de repente nos atacaron por la espalda, me hirieron en el cuello con un cuchillo y ya en el suelo me atacaron con odio, fueron como ocho las puñaladas que recibí, a mi mujer también la acuchillaron sin pesar, yo me desmayé”, explicó Ricardo Rizo, quien fue dado de alta el pasado martes.
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A Romero los delincuentes le robaron un celular valorado en 100 dólares, más 2,810 córdobas. “Yo no sé por qué la Policía solo presentó a un delincuente en este caso, existen tres más involucrados, ellos son el Chacal y el Charlie, quienes participaron en el robo. Uno de los sujetos me sacó de mi short 210 córdobas”, indicó la víctima.
La mañana de este miércoles Rizo se presentó al Instituto de Medicina Legal, donde fue valorado por forenses tras las heridas y golpes recibidos el día del robo. Oficiales de policía se presentaron a la casa de sus padres, donde recibieron el testimonio de cómo ocurrieron los hechos.
La pareja acostumbraba frecuentar el bar, ubicado del Cine Ideal, una cuadra y media al oeste. La noche de los hechos, las víctimas salían del centro nocturno, cuando fueron interceptadas por los delincuentes. “El bar se ubica a siete cuadras de donde vivimos, además algunas personas nos conocían, para ser un robo fue muy violento, al extremo que mataron a mi amor”, señaló el afectado.
No aplica cadena perpetua
Gerald Josué Torres Oviedo, quien posee antecedentes por robo con intimidación y tráfico de droga, ahora enfrenta una acusación por los delitos de asesinato agravado, asesinato frustrado y robo. La audiencia inicial se realizará el próximo 9 de marzo.
“Que se pudra en la cárcel ese maldito, estas heridas quedarán marcadas en mi cuerpo, pero el dolor más grande fue perder a mi mujer, yo pido justicia y llegaremos hasta el final, ese sujeto ya tenía antecedentes penales y andaba delinquiendo sin que la Policía hiciera algo para capturarlo”, manifestó Rizo.
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La familia de la fallecida y la del joven lesionado se encuentran inconformes, ya que la Policía les informó que el acusado no es candidato para que se le aplique la cadena perpetua por el crimen cometido. “El oficial que lleva el caso nos aclaró que la muerte de mi cuñada no corresponde a un crimen de odio, sino a un delito común. Las leyes de Nicaragua son muy complejas, queremos justicia y esto no debe de quedar impune”, detalló Darling Rizo Calderón, hermana de Ricardo.
La pareja tenía seis años de relación y habitaba en el barrio Francisco Salazar. La fallecida trabajaba en el área de limpieza de un call center y el lesionado, como ayudante de albañilería.
Brutal ataque
De acuerdo con la acusación presentada por la Fiscalía, el detenido atacó con un cuchillo por la espalda a Ricardo, al quedar tendido en el pavimento, Gerald Torres atacó con la misma arma cortopunzante a Ángela Romero Mejía, propinándole la primera herida en el pecho, la cual le perforó el pulmón izquierdo. Estando la mujer en el suelo, el acusado la acuchilló otras siete veces en la espalda, seguidamente le propinó dos heridas más en el brazo derecho y, finalmente, le hizo otra herida en el cuello.
Gerald Torres fue capturado dos días después de haber cometido el crimen, en una casa del Reparto Schick, en Managua. Al momento de la detención, se le ocupó el celular de la víctima y el cuchillo con el que atacó al matrimonio.