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En esta humilde vivienda falleció el menor de 16 años con discapacidad. Sus padres son acusados de homicidio por omisión. HOY/Archivo/Cortesía La Teja

Padres nicaragüenses enfrentarán juicio por muerte de su hijo discapacitado

Según las autoridades ticas, los padres omitieron sus responsabilidades y habrían dejado de cuidar al menor de edad

La Fiscalía de Alajuela acusó de homicidio por omisión a una pareja de nicaragüenses, padres de un menor de 16 años que sufría de discapacidad, y que murió en mayo de 2019 en su casa.

El papá del menor, de apellido Centeno Mercado y la mamá de apellidos González Vado fueron detenidos desde entonces y estaban cumpliendo prisión preventiva.

“Según la acusación fiscal, los hechos ocurrieron en Las Vueltas, La Guácima de Alajuela, donde los imputados vivían con el ofendido, quien, para ese momento, tenía 16 años de edad. De acuerdo con la prueba que se presentará en el juicio, la víctima tenía una serie de padecimientos médicos que le impedían realizar actividades por sí solo”, informó en una nota de prensa el Ministerio Público de Costa Rica.

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El juicio se celebrará del 8 al 12 de junio. El Ministerio Público también detalló que los papás del menor “omitieron algunas de sus responsabilidades como padres y, en apariencia, habrían dejado de cuidar al joven, por lo que se presume que la salud de la víctima empeoró, lo que le ocasionó la muerte el 25 de mayo del 2019”.

Pesaba solo 25 libras

Walter Espinoza, director del Organismo de Investigación Judicial (OIJ) de Costa Rica, dijo que cuando murió el adolescente de 16 años que sufría de parálisis cerebral, pesaba poco para la edad que tenía.

“Tenía el cuerpo muy ulcerado, a pesar de tener 16 años, solo pesaba 11.8 kilos (25.96 libras), se encontraba en un estado deplorable de atención y eso provocó que se hiciera un diagnóstico, que en principio nos indica que la manera de muerte es homicidio”, explicó Espinoza a los medios en mayo de 2019.

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El adolescente vivía con sus padres y tres hermanos más. “Esta es una muerte por falta de cuidado o por violar un deber que tienen las personas de no actuar debidamente en la protección de la vida de sus hijos”, aseguró Espinoza.

Los vecinos fueron quienes recogieron fondos para poder realizarle el funeral al menor. Los demás hijos quedaron bajo vigilancia del Patronato Nacional de la Infancia (PANI) de Costa Rica.

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