En una nutrida conferencia de prensa en el estadio de los Astros, la sala de prensa resultó pequeña para cubrir la introducción de Dusty Baker como el nuevo piloto del equipo. La presentación fue hecha por el propio dueño de los Astros, Jim Crane, por falta del Gerente General que fuera despedido recientemente.
Nunca había visto en la historia del Parque Minute Maid una conferencia con tantos reporteros. Las cámaras se disparaban continuamente, todo aquello sonaba como un tiroteo como los que ocurren en los países de Hispanoamérica durante los conatos revolucionarios. No hay duda, la selección de Dusty Baker por Jim Crane es todo un éxito.
Durante la conferencia de Dusty, las preguntas fueron clásicas, bien construidas, sin intención de producir controversias. Jim Crane se expresó efusivamente acerca de su nuevo dirigente en el terreno, augurando un éxito definido para la campaña que se aproxima a pasos agigantados.
Dusty contestó todas las preguntas con el aplomo acostumbrado que es característico en él. Habló del gusto de trabajar en Houston porque la mayoría de sus familiares reside en el área. Nos recordó que su primer imparable fue en el Astrodome contra el lanzador Dodger Jerry Reuss.
Cuando Dusty bajaba del escenario fue rodeado por una inmensa cantidad de reporteros para estrecharle la mano. Yo fui uno de ellos. Me reconoció, pues ambos laboramos para los Dodgers en la década de los años ochenta. En vez de darme la mano, me distinguió con un fuerte abrazo. Ahora tendré una muy buena razón para bajar al terreno.
En pocas palabras la presencia de Dusty Baker en la conferencia de prensa fue un arrebato. La alegría reinó durante todo el proceso. El orden y la disciplina de los reporteros, columnistas y camarógrafos fueron exquisitos. En el rostro del dueño Jim Crane, noté una expresión de satisfacción y orgullo como en el de Dusty.
Personalmente estoy súper satisfecho que Jim Crane haya seleccionado a Dusty Baker como el nuevo piloto de los Astros, un equipo que está casi intacto y solamente necesita una mano suave y cariñosa e inteligente como la de Baker, para llevarlo a otra experiencia de Serie Mundial. En pocas palabras es un piloto que se las sabe todas.
Al final de la entrevista, Baker dijo: “Se me presenta un reto, la ausencia del lanzador Gerrit Cole y quién será el que tomará su puesto en la rotación de abridores”.
Me inclino a creer que la solución se dará a conocer durante los entrenamientos primaverales. Para esas fechas, es posible que Jim Crane haya nombrado a su nuevo gerente general que deberá de encargarse del asunto.
Mi bola de cristal dice que Dusty será un éxito en Houston.