Las presas políticas que permanecen en la Cárcel de Mujeres La Esperanza, siguen siendo víctimas del maltrato y discriminación por parte del régimen Ortega Murillo, donde siguen sin recibir atención médica especializada pese a que varias de ellas sufren alguna enfermedad y golpeadas por custodias, denuncian familiares.
El miércoles la presa política Kenia Gutiérrez, denunció en audiencia de juicio en presencia de los custodias la forma en que fue golpeada por funcionarias de esa penitenciaría por el hecho de asistir a una de sus compañeras.
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Gutiérrez aún presentaba moretones en un brazo, confirmó a LA PRENSA su marido Joaquín Valle Morales, quien dijo después que fue suspendida la audiencia por falta de testigos, le permitieron cinco minutos para poder conversar con ella y rápidamente le comentó que por pasar agua a otra compañera de celda, de nombre Karla Vanessa Matus, fue golpeada.
No obstante, por el poco tiempo que le permitieron verla, no pudo profundizar en esta situación.
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Mientras la abogada Rosario Flores, indicó que de un momento a otro Ruth Matute podría ser trasladada a la Cárcel de Mujeres. Matute sufre insuficiencia cardíaca, y la semana pasada le colocaron un nuevo marca pasos en el hospital Salud Intregral, pero que Flores considera que por su condición, la judicial debieron haberle otorgado otra medida cautelar como arresto domiciliar.
En tanto María Mercedes Chavarría, sufre una hernia discal cervical y lumbar, por lo cual está inmóvil de la cintura para abajo, por lo que requiere ser auxiliada por sus compañeras.
“Es un estado bastante crítico, porque no puede pasar mucho tiempo mal sentada, mal acostada, estar mucho tiempo sin su tratamiento”, dijo su hija María Chavarría, quien no entiende cómo fue vinculada a las protestas de los autoconvocados, pues es sandinista que trabajaba en la Alcaldía Orteguista de León.
La dirigente del Movimiento Autónomo de Mujeres (MAM), Juanita Jiménez, cuestionó ese tratamiento discriminatorio a los presos políticos en general y en particular contra las mujeres y manifestó que “la saña” con que actúan no tiene antecedentes en el país.
Jiménez dijo tener información de la nueva golpiza en la cárcel en este caso contra Kenia Gutiérrez por solicitar atención médica para una de sus compañeras.
Jiménez mencionó que tienen información también que Olesia Muñoz, lleva tres día en el puesto de salud por que ha empeorado su situación por motivos de hipertensión. Otras las más jóvenes sufren de estrés carcelario.