El nicaragüense Carlos Alberto Bonilla López fue condenado este martes a noventa años de cárcel por la presunta muerte de un disparo de un agente de la Policía Orteguista (PO), en el marco de las protestas antigubernamentales que comenzaron en abril pasado.
Bonilla fue hallado culpable el pasado 27 de septiembre de los delitos de asesinato agravado en perjuicio del oficial Hilton Rafael Manzanares Alvarado, y del asesinato en grado de frustración de otros cuatro agentes, y este martes fue leída la sentencia.
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La juez Decimotercera Penal de Juicio de Managua, Fátima Rosales, condenó a Bonilla a treinta años de prisión por el asesinato del agente Manzanares, y a sesenta por el delito de asesinato en grado de frustración (15 años por cada uno de los policía). Bonilla cumplirá en la práctica treinta años de cárcel, el máximo que permiten las leyes de Nicaragua.
De acuerdo con la sentencia, Bonilla “mató” al agente Manzanares durante una protesta la noche del 19 de abril pasado en las inmediaciones de la Universidad Politécnica de Nicaragua (Upoli).
El subinspector Manzanares, que fue ascendido a capitán de forma póstuma, intentaba restablecer el orden cerca de la universidad junto a otros agentes antidisturbios cuando recibió un disparo mortal en la espalda, según la acusación del Ministerio Público.
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La juez (de afinidad orteguista) determinó que el Ministerio Público pudo demostrar su “teoría fáctica” de que el acusado es el autor directo de los delitos imputados, de acuerdo con la información disponible.
Cifras del terror
Nicaragua vive una crisis social y política con protestas contra el dictador del país, Daniel Ortega, que ha dejado entre 322 y 512 asesinatos, y miles de heridos, cometidos por policías y paramilitares según organismos humanitarios locales e internacionales.
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El régimen reconoce 199 víctimas y denuncia un intento de “golpe de Estado”. Los organismos humanitarios sostienen que en Nicaragua hay más de 300 “presos políticos”, en tanto el Gobierno afirma que hay más de 200 detenidos por “golpistas y terroristas”.