El presidente de la Sociedad Interamericana de Prensa (SIP) y director del diario peruano La República, Gustavo Mohme, llegó este lunes a Nicaragua como parte de una misión conjunta de ese organismo y Reporteros Sin Fronteras (RSF).
La visita busca constatar el estado del ejercicio periodístico en Nicaragua.
Mohme manifestó que las denuncias de persecución, robo y amenazas físicas a los periodistas en el país lo hacen percibir una situación de “deterioro de este ejercicio”.
“Estamos recogiendo testimonios de persecuciones y amenazas físicas, no solo personales sino también a través de instituciones del Estado; de robos de cámaras, amenazas a través de redes (sociales), como una forma de minar el espíritu de los periodistas que aún ejercen con entusiasmo y defienden su independencia”, dijo Mohme al salir la tarde de ayer de un encuentro con periodistas y directores de medios de comunicación independientes.
La misión de la SIP y RSF fue recibida en el país por el director de LA PRENSA, Jaime Chamorro Cardenal.
Integrantes de la misión
Los demás integrantes de la misión conjunta son el argentino Ricardo Trotti, director ejecutivo de la SIP; el mexicano Roberto Rock, director del portal de noticias La Silla Rota y presidente de la comisión de libertad de expresión del organismo, y Emmanuel Colombié, director de RSF para América Latina.
También estaba previsto que participara en la misión el hondureño Jorge Canahuati, pero no le otorgaron el permiso a tiempo para entrar al país en el consulado nicaragüense de su país.
Mohme y Trotti fueron retenidos más de media hora a su llegada al aeropuerto, tiempo en que fueron interrogados. Después ingresaron a Nicaragua.
Estado del periodismo
Mohme explicó que la misión conjunta de la SIP y RSF fue creada porque existe preocupación sobre la situación de crisis en Nicaragua, y quieren informarse sobre las condiciones en las que se está ejerciendo el periodismo.
El país vive una crisis desde el pasado 18 de abril que comenzó la represión policial y de fuerzas paramilitares contra las protestas civiles que demandan la salida del poder de Daniel Ortega y su esposa Rosario Murillo.
En medio de la represión se ha incrementado la censura y la violencia contra los periodistas y los medios de comunicación independientes. Más de 440 personas han muerto a causa de la represión —según organismos de defensa de derechos humanos locales—, entre ellos el periodista Ángel Gahona, quien fue asesinado cuando transmitía en vivo una protesta en la ciudad de Bluefields, Caribe Sur del país.
Durante las protestas, además, los periodistas han sido golpeados, robados y acosados por simpatizantes del Gobierno.
El poder ejecutivo controla la mayor parte de los medios de comunicación televisivos, mientras que los canales de televisión con criterio independiente al Gobierno fueron sacados del aire en los primeros días de la crisis por transmitir la cruenta represión contra los manifestantes.
Radio Darío, de tendencia crítica al Gobierno, fue quemada en León, mientras que en Managua fue incendiada la oficialista Radio Ya.
Los resultados de la misión conjunta de la SIP y RSF serán dados a conocer este miércoles en una rueda de prensa. La misión permanecerá hasta ese día.
También tienen programados encuentros con periodistas y medios de comunicación locales, de otros departamentos y regionales.
Además quieren hablar con diplomáticos, representantes de organizaciones políticas y de la Iglesia católica.
Solicitud a Ortega sin respuesta
La misión tramitó una solicitud de audiencia con el poder ejecutivo, a través de una carta a la primera dama, vicepresidenta designada y encargada de comunicación del gobierno, Rosario Murillo, y al presidente designado Daniel Ortega, pero hasta ayer no le habían contestado.
Durante la crisis, la SIP en reiteradas ocasiones ha cuestionado las continuas agresiones a periodistas durante las manifestaciones ciudadanas y ha hecho un llamado al cese de la represión y a que se garantice “el derecho a la libertad de expresión y de reunión de los nicaragüenses”.