Postes y monumentos pintados de azul y blanco -que muchos antes eran rojinegro- abundan en diferentes partes del país en señal de la protesta ciudadana que este viernes cumple diez días y que el Gobierno ha reprimido y tratado de deslegitimar desesperadamente con diferentes métodos.
En Camino de Oriente, en Managua, donde todo empezó cuando el miércoles 18 de abril grupos paramilitares atacaron a un grupo de ciudadanos que protestaban pacíficamente por las reformas al Instituto Nicaragüense de Seguridad Social (INSS) –derogadas el domingo 22– el azul y blanco se ve en la mayoría de postes e incluso en el asfalto.
También, en los alrededores de la rotonda Jean Paul Genie, que ha sido un constante punto de concentración de los manifestantes y donde fueron derribados los dos árboles de la vida, los colores del sandinismo ha sido desplazado por el azul y blanco.
En las protestas, la ciudadanía ha gritado su descontento contra el Gobierno actual y lo ha plasmado en postes, rótulos y paredes con pintas; que ahora, en el caso de la capital la Alcaldía se dedica a borrarlas.
Este jueves un camión trasladaba a obreros de la Dirección de Ornato sobre la Carretera a Masaya para que a punta de brocha borraran las pintas.