El gobierno del presidente designado por el poder electoral, Daniel Ortega, responsabilizó a los nicaragüenses beneficiarios del Estatus de Protección Temporal (TPS), de ser los causantes de la eliminación de este beneficio porque no buscaron información en los consulados de Nicaragua en Estados Unidos.
“Estos hermanos nicaragüenses, ni hoy ni ayer, es decir, en ningún momento, han buscado los consulados o la embajada de nuestro país en Washington para solicitar respaldo en relación a su situación en los Estados Unidos”, informó este miércoles el Gobierno, a través de una nota de prensa.
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El Gobierno de Estados Unidos decidió terminar con el TPS para Nicaragua, luego de considerar que el país ya no vive en las condiciones por las que fue concedido, además porque tampoco “hubo una solicitud para extenderlo”, de parte del gobierno sandinista, según un comunicado de la secretaria interina del Departamento de Seguridad Interna (DHS), Elaine Duke.
Estados Unidos concedió en 1999 el TPS a Honduras y a Nicaragua después del devastador huracán Mitch, en 1998, y las sucesivas administraciones lo renovaron desde entonces.
Diferencia en cifras
En la nota de prensa, el gobierno de Ortega detalló menos beneficiarios de los que indican altos funcionarios estadounidenses. Según el DHS, más de 5,300 nicaragüenses recibieron este beneficio, pero el gobierno de Ortega asegura que son 2,500 nicaragüenses.
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Indicó también que están tratando de localizar a los beneficiarios “para conocer sus planes”, en los 14 meses de plazo para que resuelvan su situación.
“Hemos realizado, y estamos realizando, indagaciones, con todos los organismos que trabajan con los migrantes centroamericanos, en los propios Estados Unidos, y ofreciendo a nuestros hermanos nicaragüenses la posibilidad de contactarnos para conocer de sus planes, en los 14 meses que el Gobierno de los Estados Unidos ha dispuesto como plazo para que puedan cumplir con las disposiciones de su Departamento de Migración”, explicó la nota.
Según la nota, compartida por Rosario Murillo, la mayoría de los nicaragüenses beneficiados con el TPS ya podrían haber regularizado su situación, emigrado hacia otros países, o incluso estar de regreso en Nicaragua, según fuentes extraoficiales que consultaron.