Organizaciones defensoras de mujeres en Nicaragua demandaron este viernes 3 de junio, que el crimen cometido contra la joven Xiomara Cruz sea sancionado conforme a lo establecido en la Ley 779 (Ley Integral Contra la Violencia Hacia las Mujeres).
Ellas demandan que el caso no sea abordado como un delito común, tal y como fue remitido a los tribunales el expediente donde se acusa a Rodolfo García de haberla matado.
“¡Justicia para Xiomara! ¡Justicia para todas las mujeres!”, reclamaba en coro un grupo de mujeres que junto a los familiares de Xiomara Cruz se desplazó por algunas calles de Managua, desde la Plaza La Biblia hasta las instalaciones de Plaza El Sol, sede central de la Policía Nacional.
“¡NI UNA MUERTE MÁS!”
Con mantas y pancartas reclamaban: “Ni una asesinada más”. En Plaza El Sol demandaron ser atendidas por la jefa de facto de la Policía Nacional, primera comisionada Aminta Granera, pero los portones permanecieron cerrados.
“Esperábamos respuestas”, dijo Grey Gutiérrez, prima de la víctima, tras explicar que querían saber el móvil del crimen, así como compartir las sospechas de que en el caso hay más implicados.
Mirna Blandón, dirigente del movimiento feminista, criticó que la Policía no haya escuchado la demanda de la familia de la víctima y “que no haya salido nadie a darnos la cara”.
Dirigentes feministas como Juanita Jiménez, del Movimiento Autónomo de Mujeres (MAM), que marcharon hasta Plaza El Sol junto a Carla Torres, madre de Xiomara Cruz, también demandaban que el crimen sea tipificado conforme a lo establecido por el artículo 9, de la Ley 779.
FEMICIDIO, NO ASESINATO
“Estamos demandando que este crimen sea sancionado como feminicidio y que la Policía Nacional no cierre las investigaciones… y se vaya a fondo, hay muchas especulaciones a nivel local que señalan que en este crimen no solo está implicado ‘El Popo’ (Rodolfo José García), es posible que haya más implicados”, denunció Jiménez.
La dirigente del MAM señaló: “Es responsabilidad de la institución policial poner en claro cuáles son las verdaderas circunstancias por las cuales es asesinada y despojada de su vida Xiomara”.
La Policía detuvo a García y lo trasladó a la Dirección de Auxilio Judicial, donde el 26 de mayo confesó haber apuñalado a Xiomara, envolver su cuerpo en sábanas y enterrarla en un sumidero en una habitación de su casa la noche del 8 de abril.
El hecho fue tipificado como asesinato y no como feminicidio, razón por la cual las organizaciones de mujeres están protestando.
Elia Palacios, del Centro de Mujeres Axayacalt, indicó que debe quedar claro que los agresores “no están locos” tal y como según ella, se pretende hacer creer en este caso.
Palacios denunció “al Estado de Nicaragua por cómplice de la violencia contra las mujeres y violador de derechos humanos”, pues según ella, el gobierno “no garantiza seguridad y el derecho a la vida de las mujeres”.
A la señora Aminta Granera, ella es mujer que nos entienda, ella es mujer, tiene hijas, ella sabe el dolor de una madre… que se ponga en el lugar de mi madre que está sufriendo”. Geisel Cruz, hermana de Xiomara.