La construcción de la refinería de El Supremo Sueño de Bolívar, el satélite Nicasat, la construcción del Canal Interoceánico y ahora el proyecto hidroeléctrico Tumarín “pasa a la lista de ilusiones que ha sembrado el Gobierno” afirma el diputado Eliseo Núñez, de la Bancada Alianza Liberal Independiente (Bapli).
Una fuente cercana a Centrales Hidroeléctricas de Nicaragua (CHN), encargada del proyecto hidroeléctrico dijo, que por el momento habrá algunos cambios a lo interno. “El presidente de CHN, Roberto Abreu se va retirar y vendrá una persona de menor rango, pero las oficinas seguirán funcionando, mientras se decide el destino del proyecto”.
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Roberto Abreu, le dijo a LA PRENSA que estaba en una reunión que no podía atendernos. Asimismo se llamó a la Embajada de Brasil en Nicaragua y la secretaria dijo que el embajador Luiz Felipe Mendoça, está de vacaciones y regresa hasta el 20 de abril.
El empresario César Zamora, presidente de la Cámara de Energía de Nicaragua (CEN) ha dicho en reiteradas ocasiones que es importante que se defina que va pasar con Tumarín, que si se va ser o no, porque es un proyecto 253 megavatios, que cubrirá el 25 por ciento de la demanda con un precio de energía alto, que nunca ha sido viable y más ahora que el precio del petróleo bajo.
Por su parte el diputado Carlos Langrand, de la Bancada Alianza Liberal Independiente (Bapli) manifestó que desde hace tres meses han solicitado ante la Comisión de Infraestructura de la Asamblea Nacional que se cite a los empresarios de CHN pero que nunca se obtuvo respuesta a la solicitud, lo que era preocupante tras los escándalos de corrupción donde se vio involucrada la empresa brasileña.
QUÉ VA PASAR CON TUMARÍN
Otra de las dudas con el proyecto es que pasar con la inversión que ha hecho CHN, si decide retirarse del país, pues hasta la fecha se ha invertido cincuenta millones de dólares entre construcción de la carretera de San Pedro del Norte y la indemnización de las familias de Apawás.
Según la Ley 695, Ley Especial para el Desarrollo del Proyecto Hidroeléctrico Tumarín la empresa no tiene ninguna obligación y si se retira en toda caso que debe pagar, no es la empresa por el incumplimiento de contrato sino que el Estado de Nicaragua debe reconocerle lo invertido.
Sin embargo el diputado Carlos Langrand de (Bapli) dijo que el país debe demandar a los empresarios de la empresa brasileña Queiroz Galvao por el incumplimiento del proyecto y la pérdidas que ocasionó al país.