La Comisión Nicaragüense de Béisbol Superior (CNBS) realizó un examen mental al expelotero de Grandes Ligas Everth Cabrera, quien busca renovar su carrera en Nicaragua, tras dificultades personales que incluyeron la permanencia en un hospital siquiátrico.
El examen mental formó parte de otros análisis médicos, incluidas pruebas de dopaje, practicados en el Instituto de Medicina Legal (IML), informaron la CNBS y el pelotero nicaragüense.
“Es una prueba normal, es lo necesario, están tomando una tremenda medida, soy figura pública en Nicaragua, eso lo sé (…) son las normas que debemos tomar”, dijo Cabrera a periodistas.
El presidente de la CNBS, Carlos Reyes, afirmó que los resultados de los exámenes no necesariamente afectarán el retorno del pelotero al béisbol, ya que existe la esperanza de que su salud mejore si práctica este deporte en un nivel organizado.
Cabrera, de 29 años, espera retornar este fin de semana con el equipo Tiburones de Granada, de la liga no profesional “Germán Pomares”.
El pelotero fue internado en noviembre de 2015 en un hospital siquiátrico de Nicaragua, para resolver problemas de consumo de alcohol y marihuana, informaron entonces sus familiares.
Un mes antes había sido despedido de los Tomateros de Culiacán, de la liga mexicana, por bajo rendimiento y supuestos problemas de indisciplina.
El torpedero bateó para un promedio de .246, con 138 bases robadas y 132 carreras impulsadas, en 510 juegos en seis años en las Grandes Ligas, todos con los Padres de San Diego.
En 2013 pagó un castigo de 50 partidos por haber sido involucrado en el caso Biogenesis.
En 2014 fue detenido por consumo de marihuana en Estados Unidos y no logró hacer el equipo grande con los Orioles de Baltimore.
Cabrera, nacido en Nandaime, a 67 kilómetros al sureste de Managua, tuvo en 2012 su mejor año, cuando fue líder en robos de bases en la Liga Nacional, con 44, y electo Atleta del Año por la Asociación de Cronistas Deportivos de Nicaragua.