El presidente de Guatemala, Otto Pérez Molina, declaró hoy al 2015 como “el año de la no violencia” en el país centroamericano, donde la criminalidad se cobró el año pasado 5.924 víctimas, según las estadísticas policiales.
Pérez Molina hizo el anuncio durante la presentación del informe del tercer año de su gobierno en un acto celebrado en el Patio de la Paz del Palacio Nacional de la Cultura.
El mandatario dijo que tomó esa decisión debido a los logros que ha obtenido en materia de seguridad en Guatemala, donde las fuerzas de seguridad “han debilitado al crimen organizado”.
Detalló que de los 39 homicidios que se registraba en 2011 por cada 100.000 habitantes, se redujo en el 2014 a 31 debido a las estrategias impulsadas por su administración.
Dijo que la percepción de la población sobre la violencia tendrá que cambiar con la reducción de los hechos delictivos que se han logrado.
Destacó la reestructuración de la Policía Nacional Civil (PNC), su profesionalización, el aumento a 34.000 agentes, 9.500 más de los que tenía hace tres años, y anunció que la meta es dejar a la institución con 35,000 elementos.
Pérez Molina manifestó que en los tres años de su administración los robos se disminuyeron en 31 por ciento, ya que el año pasado se registraron 95 hechos delictivos por cada 100.000 habitantes.
Sin desmenuzar datos específicos, el gobernante agregó que el robo de vehículos se redujo en 36 por ciento, el de armas en 15, a comercio en 12, a personas 18 y a turistas el 61 %.
“Hemos luchado frontalmente contra otros flagelos que comprometen la seguridad de los guatemaltecos y de esta cuenta hemos debilitado el crimen organizado”, afirmó.
El mandatario invitó a todos los sectores de la sociedad a sumarse a la declaración del 2015 “como el año de la no violencia” en el país centroamericano.